Escurridores y cuencos para hacer lámparas

Si quieres tener en tu casa una lámpara original e innovadora, puedes hacerla por ti mismo utilizando un escurridor o un cuenco de la cocina.
Escurridores y cuencos para hacer lámparas
Francisco Jiménez

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez.

Última actualización: 08 abril, 2019

La originalidad no requiere un diseño sofisticado o demasiado complejo. Algunas tipologías sencillas y sutiles pueden ser suficientes como para llegar a ser un recurso decorativo para el hogar. Un caso ejemplar es el uso de escurridores y cuencos para hacer lámparas.

El menaje del hogar puede considerarse un medio realmente interesante para la decoración. Por eso, puede cambiarse su funcionalidad y obtener, así, una estética diferente, tratando de ofrecer un contenido que no tenía en su origen.

No obstante, la propia forma de los escurridores y los cuencos permite que trabajemos su aplicación en el mobiliario y que tenga una capacidad decorativa completamente innovadora; es decir, su formato es algo novedoso y original, configurándose como un elemento completamente vanguardista para cualquier espacio de la casa.

Escurridores y cuencos: cuando lo funcional se convierte en decoración

Escurridores de colores.
Escurridores de colores / pinterest.es

Al observar directamente un escurridor, quizá no podamos ver en él un recurso decorativo, puede que le falte algo más para que nos despierte la simpatía y las ganas de trabajarlo. Es, sin duda, un elemento funcional que se emplea en la cocina habitualmente.

Sin embargo, puede trabajarse de tal manera que podamos darle un lavado de cara y elevarlo a condición de pieza decorativa. En el fondo, resulta algo distante y enfrentado con el propio espacio donde va a estar colocado. De todos modos, esta concepción se cambia al atribuirle otros contenidos estéticos.

Lo mismo podría decirse de cualquier cuenco, ya sean los típicos empleados para la comida o los que sirven de recipiente. Los hay de cerámica, plástico o cristal, y todos ellos pueden ser una lámpara si les aplicamos las fórmulas exactas para poder llevar a cabo la transformación.

Cualquier objeto guarda en su interior un poco de arte.

Escurridores de metal

Lámparas trifásicas con forma de farolillo metálico para una cocina de madera

Si queremos realizar una lámpara con un escurridor, los metalizados son los mejores, principalmente por ser un material resistente y de calidad, capaz de aguantar el calor que desprende la bombilla. ¿Qué pasos debemos seguir?

  • Tienen forma troncocónica, con agujeros en los laterales y mangos en dos extremos. Es necesario abrir un hueco en la base para poder meter la bombilla y el cable. Asegúrate de que queda todo bien fijado y que no va a quedar la instalación deficiente.
  • La luz se irradia hacia el exterior a través de los propios agujeros, pero, sobre todo, a través de la propia concavidad, sirviendo de campana y proyectando la luz hacia abajo de manera directa.
  • A su vez, los escurridores suelen ser de un solo color. Esto permite dinamizar el ambiente y darle un toque cromático al espacio. De esta manera, resulta más fácil insertar este producto dentro de un ambiente.
  • Los de plástico también pueden servir, pero hay que tener cuidado de que no se sobrecalienten demasiado, ya que pueden producirse desperfectos exteriores y que se estropee el propio material.

Los cuencos, una fácil transformación

Lámparas hechas con cuencos.
Cuencos / bricolaje.facilisimo.com

En realidad, convertir un cuenco en lámpara no es tan complicado, tanto a nivel manual como a nivel estético-decorativo. ¿Esto a qué se debe? Principalmente, a que el formato ayuda mucho para que llegue a cumplir la función de lámpara.

Al igual que los escurridores, los metalizados son los mejores, tanto por su resistencia como por su firmeza. Además, no sufren ante el calor. Sin embargo, hay un inconveniente: a la hora de hacer el agujero no es tarea fácil, lo que supone la intervención de un herrero especialista.

En cuanto al aspecto estético, resulta bastante sencillo de trabajar con el fin de que pueda amoldarse a cualquier estilo decorativo. La forma es bastante depurada, y suele guardar una apariencia sencilla que le permite complementarse perfectamente a cualquier ambiente.

No importa el tipo de cuenco; incluso, los empleados para la comida pueden ser una buena opción.

¿Qué hay de los cuencos de madera?

Lámparas hechas con cuencos de madera.
Lámparas hechas con cuencos / tecnohotelnews.com

La madera es un material que normalmente lo utilizamos para decoración de recipientes o esculturas, pero ¿podría tener presencia en el mundo de las lámparas? Pues sí, de hecho puede trabajarse con el fin de poder moldearlo con la forma que se quiera.

La propia calidez de la luz se verá reforzada por un cuenco de madera que se ha convertido en campana de la lámpara. De esta manera, se ha conseguido un diseño realmente sutil e innovador.