Alfombras shaggy de pelo largo: la suavidad bajo nuestros pies

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez

Última actualización: 01 noviembre, 2020

El suelo del hogar no tiene porqué quedar al descubierto. Una manera de ganar confort y bienestar es a través de las alfombras shaggy de pelo largo: la suavidad bajo nuestros pies con el fin de evitar el frío del suelo.

Cuando decoramos los interiores, solemos recurrir a los típicos formatos y materiales. De este modo, repetimos esquemas que no aportan nada de originalidad, sino más bien todo lo contrario: vuelta a los sistemas ya conocidos.

En el caso de los suelos, se pueden trabajar desde diferentes vertientes. Las alfombras son una buena apuesta, teniendo en cuenta la diversidad existente en el mercado, la variedad de colores, las texturas y las formas con las que podemos ornamentar el conjunto.

¿Qué son las alfombras shaggy de pelo largo?

Conocidas también como alfombras de pelo largo, destacan por convertir los espacios en lugares más acogedores y agradables. La pisada es completamente distinta a la que se puede percibir con otras tipologías, sobre todo por ser más mullidas y cómodas.

Están hechas de poliéster, con un pelo que gana cierta altura y produce una sensación de suavidad inigualable. Dentro del ámbito de las texturas, estas son las más interesantes al ser muy acolchadas y perfectamente adaptables a cualquier tipo de suelo.

Las hay de diferentes tamaños, desde las más grandes que pueden ocupar un espacio amplio en el salón hasta las más reducidas para situarlas junto a la cama. En el fondo, son versátiles y funcionales, pero a la vez colaboran en la decoración del conjunto y enriquecen la estética de forma contundente.

Un recurso que ayuda a embellecer a la vez que genera comodidad.

Aportación estética en los interiores

Estéticamente tienen mucho que decir. Transmiten carácter y ennoblecen la habitación, complementándose muy bien con el resto de elementos y ofreciendo una imagen que favorece el ambiente. Vamos a conocer algunos detalles más sobre este recurso:

1. En el salón, encajan a la perfección, principalmente porque se complementan muy bien con el sofá; además, se puede situar la mesa central justo encima. No obstante, cabe la posibilidad de que dejemos libre todo a su alrededor y que reciba así todo el protagonismo.
2. En el dormitorio, también tiene cabida. Es una manera de que el lugar sea más confortable. Muchas veces solemos levantarnos descalzos; por este motivo, se agradece tener una alfombra tupida y suave que transmita calor a nuestro pies.
3. No se recomienda su disposición en la entrada, teniendo en cuenta que en este espacio pisamos con calzado de la calle y, en realidad, pueden deteriorarse fácilmente. Hay que tratarlas con cuidado, sin exigirlas demasiado y utilizando un calzado que no resulte duro.
4. Su apariencia enaltece la casa. Dentro del estilo clásico, encaja muy bien, pero también se relaciona con estilos contemporáneos, vanguardistas y minimalistas. A su vez, son fáciles de limpiar.

Posibilidades cromáticas y sus significados

No solo destacan por la variedad de formatos, también por las distintas posibilidades cromáticas. Las hay de todos los tipos, desde la más radiantes y llamativas (rosa fucsia, amarillo limón, naranja, rojo pasión, etc…) hasta las sencillas: blancas y negras.

Aquellas que tienen tonos neutros son las más demandadas. Socialmente, se recurre a esta tipología por no generar controversias internas; es decir, se prefiere que la alfombra pase desapercibida y contribuya de forma anecdótica.

Las más compradas son las de color beige, marrón y gris. Se combinan muy bien con otros recursos, ya sean oscuros o claros, sin destacar en exceso pero, por otro lado, ofrecen elegancia. De hecho, las de colores son más originales.

La variedad es muy amplia; lo mejor es acudir al mercado y escoger la que mejor se adapte al hogar.

Estampados y diseños curiosos

También, tenemos la opción de escoger alfombras shaggy de pelo largo con diseños y estampados. Es una manera de tematizar los espacios sin que perdamos la confortabilidad.

Los más recurrentes son las líneas rectas, triángulos, fórmulas geométricas y otros planteamientos esquemáticos. Algunas tiendas tienen contenidos específicos; es decir, con alguna figura reconocible o con un estampado llamativo.

En definitiva, tenemos la oportunidad de incorporar en el hogar un componente muy interesante a la par que peculiar. Indudablemente, se consideran una buena aportación decorativa que ayuda, incluso, a nivel psicológico.