Cómo decorar una casa con estilo mediterráneo
Escrito y verificado por la historiadora del arte Sofía Sangrador del Río
En este artículo queremos enseñarte todo sobre cómo conseguir una casa con estilo mediterráneo. Además de en Italia o Grecia, también es bastante usual en las costas españolas, aunque a día de hoy podemos verlo en casas de ciudad, alejadas de las costas.
Es la mejor manera de evocar las sensaciones que nos provoca el estar en esos lugares llenos de encanto. Así, vivas donde vivas, podrás dar un toque veraniego o costero en tu hogar.
Como verás, por lo general son espacios con cierto toque rústico, suelen ser sencillos, pero con mucho encanto. Por lo general, aunque haya accesorios y complementos, las paredes suelen estar bastante liberadas de elementos decorativos, siguiendo un poco las pautas del minimalismo.
En los siguientes apartados, te vamos a dejar las claves necesarias para que puedas decorar tu casa con estilo mediterráneo sin ningún problema. El resultado te encantará.
Los azules y blancos son indispensables
No te cansarás de ver la combinación entre blanco y azul, es fundamental en cualquier espacio. Como ya hemos visto en otros artículos, el color blanco aporta sensación de luminosidad y de amplitud, y puede hacer que los espacios parezcan más grandes de lo que son en realidad.
Por otro lado, los azules nos remitirán al cielo y al mar Mediterráneo (con lugares como las cuevas azules de la isla de Paxos). Nos aportarán sensación de quietud y de tranquilidad. Da igual la tonalidad: turquesa, cielo, índigo… Todos son válidos.
Y, además, puedes dar algunos toques con tonos tierra: ocres, beige, verde oliva. Con todos estos colores, las estancias quedarán luminosas, amplias y diáfanas.
Aunque, sin duda, la base de toda la casa debe ser el blanco. Los otros colores pueden tener su presencia en recipientes de cristal azul, ropa de cama, en las contraventanas, en la vajilla… Hay mil maneras diferentes.
Opta por espacios abiertos
Aunque no siempre es posible, ten en cuenta que, dentro de la casa, son habituales los espacios abiertos. Ejemplo de ello son cocinas abiertas al salón, salón y comedor unidos en una misma habitación… Así, la luz natural llegará con facilidad a todos los rincones. Por eso, es importante que, si pones cortinas, tamicen mucho la luz, para no impedir su paso.
Para hacer pequeñas separaciones, muchos optan por pequeños cambios de nivel (con uno o dos escalones) o con amplios arcos abiertos en las paredes que dan entrada a las estancias.
También se da bastante importancia a los espacios exteriores, como jardines, patios, terrazas o balcones, que suelen estar pintados en blanco y tienen muchas plantitas de colores. En los lugares con clima mediterráneo, son lugares de encuentro y reunión con familiares y amigos.
Para no sobrecargar los espacios, debes escoger pocos muebles. Los diseños ideales son aquellos que son sencillos, pero sólidos, de madera o fibras naturales (en el caso de asientos), para potenciar la naturalidad.
Los materiales más utilizados
Sin duda, los materiales más utilizados son la piedra, la madera, la arcilla y el adobe. Como ejemplo de ello, vemos cómo en muchas casas las paredes dejan piedras a la vista, ya sea total o parcialmente (paredes blancas encaladas). En la zona del Mediterráneo, los muros suelen ser gruesos, para mantener mejor la temperatura en el interior.
También es frecuente encontrar vigas de madera a la vista en techos o en paredes, ya sea con la madera en su estado natural o cubierta con pintura blanca. Esto dará un toque muy natural y rústico, ideal en este tipo de espacios.
Centrándonos brevemente en los suelos, lo más normal es que sean de piedra o estén cubiertos sobre todo con baldosas con tonos azules (por ejemplo, las de estilo marroquí), aunque algunas veces podemos encontrarlos de madera.
Tampoco hay que olvidar la importancia de los textiles, destacan principalmente las fibras naturales, aportarán un toque natural, rústico. Por ejemplo, podemos encontrar lámparas de mimbre o cestas hechas con materiales del estilo, donde podrás guardar toallas, por ejemplo.
Normalmente, las alfombras más utilizadas son aquellas que están hechas con materiales como mimbre o ratán. Algunas pueden parecer incluso ásperas, pero es parte de su encanto. Para combinarlas, puedes colocar pequeños accesorios con este tipo de materiales. Por ejemplo, sombreros colgados en la pared, damajuanas con revestimiento de fibra naturales…
Tener una casa con estilo mediterráneo es posible, solo tienes que seguir estos consejos e ideas. Solo debes apostar por lo natural y tomar el blanco como base, para después dar toques con los distintos tonos de azul. Así, respirarás frescura y calma.