¿Cómo limpiar las pantallas del ordenador y la televisión?
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
La higiene del hogar se debe mantener en todos los ámbitos, tanto a nivel personal como en la propia decoración. Por eso, vamos a valorar cómo limpiar las pantallas del ordenador y la televisión.
Uno de los mayores inconvenientes a los que nos enfrentamos semanalmente es la acumulación de polvo y suciedad. Aunque no lo parezca, se convierte en una lacra que puede suponer un deterioro del mobiliario a largo plazo.
En el caso de los aparatos electrónicos, debemos tener especial cuidado. Son frágiles si los desatendemos, hasta tal punto que comienzan a dar errores o, simplemente, dejan de funcionar. En el fondo, esto es algo que se puede solucionar si sabemos cómo paliar el problema.
En búsqueda de la máxima comodidad
Estamos de acuerdo en que la limpieza del hogar nos ayuda a tener un espacio más saludable. No hay nada mejor que estar en un lugar bien acondicionado y con todos los recursos en orden y preparados para su uso.
Aquellos que generalmente solemos utilizar a diario requieren una atención precisa. Por supuesto, deben estar en perfectas condiciones para el uso. El objetivo es que alcancemos el grado máximo de comodidad con el fin de sentirnos a gusto.
La dejadez no debe contemplarse. Bajo ningún concepto se debe practicar el abandono y la desidia en casa, especialmente si convivimos con más gente. En realidad, es un factor de respeto y una necesidad.
Tanto el ordenador como la televisión están disponibles para todos los miembros de la familia. ¿Qué ocurriría si se encuentran en mal estado? No solo corren el riesgo de deteriorarse, sino que se pierde la comodidad y la funcionalidad.
La idea es que nos sintamos cómodos con los recursos que tenemos en el hogar.
Proceso para limpiar las pantallas
El hecho de limpiar las pantallas nos beneficia en el trabajo y en el disfrute personal. Sin embargo, ¿sabemos realmente cómo realizar el procedimiento? Hay que tener cuidado en la intervención y convertirlo en un hábito que se puede enseñar a nuestros hijos.
- De toda la vida, el trapo húmedo ha servido como herramienta para la limpieza. Se considera un planteamiento básico que, al fin y al cabo, nos puede solucionar la situación rápidamente pero no elimina la suciedad al 100% ni tampoco protege la pantalla.
- Las gamuzas atrapapolvo son fabulosas. Nos ayudan a quitar toda la suciedad de manera inmediata y eliminan el polvo en lugar de desplazarlo, acabando con los quebraderos de cabeza y sin grandes esfuerzos.
- Hay que tener en cuenta que las pantallas son vidrios finos, por lo que tampoco hay que emplear productos agresivos o bayetas que dejen marcas en la superficie. Nada de utilizar estropajos o esponjas demasiados porosas.
- Se debe tener especial cuidado en el contacto, puesto que el aplicar demasiada humedad el aparato podría salir perjudicado. De la misma manera, no se puede provocar ningún tipo de impacto o frotar con excesivo ahínco.
Productos especiales para la limpieza
Las pantallas del ordenador y la televisión pueden recibir un tratamiento con el que conseguir resultados sorprendentes. Un caso ejemplar sería combinando agua y alcohol isopropílico (s0lamente un cuarto del total de este último).
Esta fórmula no daña la pantalla ni tampoco al resto de materiales. También, se venden limpiadores especiales con alcohol que permiten obtener una limpieza superior y la posibilidad de mejorar la calidad del visionado, sobre todo en las pantallas de plasma.
Otro caso son las bayetas hipoalergénicas y biodegradables. No perjudican la superficie y resultan agradables al tacto.
En cuanto a los limpiacristales que conocemos comúnmente, es preferible evitarlos, ya que algunos resultan un tanto agresivos y pueden producir un efecto negativo a largo plazo.
Fórmulas para prevenir el polvo
Para ser más exactos, no existe una fórmula concreta que acabe con la suciedad de forma rápida. Esta vuelve a aparecer al poco tiempo; por eso, conviene ventilar todos los días, no saturar la habitación con demasiados elementos y tratar de mantener la higiene de forma constante.
En definitiva, el objetivo es que consigamos un lugar en mejores condiciones, más limpio y natural, con las garantías necesarias para conseguir confort y bienestar. Solo así disfrutaremos de un buen rato en familia utilizando la televisión o el ordenador.
- Tabero, Pepa: Manual de la casa limpia y ordenada, La Esfera, 2016.