Fregaderos para casas de campo

Los fregaderos para casas de campo son especiales y aportan un aire cálido que nos hace recordar a nuestros antepasados del pueblo.

Lo cierto es que este tipo de fregaderos es cada vez más común en casas de todo tipo y no solo en casas de campo. Esto se debe a que son muy funcionales y se tornan uno de los principales atractivos de las cocinas.

Los fregaderos son un elemento de la cocina que muchas veces elegimos casi al azar. Sin embargo, es un elemento muy importante ya que forma parte fundamental de la cocina.

Aunque hoy en día la mayoría de hogares disponen de un lavavajillas, el fregadero sigue siendo el lugar donde lavamos y limpiamos las frutas y verduras, utilizamos para colocar agua en los cazos, etc. 

Es decir, no se debe tomar a la ligera su elección, ya que de hacerlo mal saltará a la vista.

En el artículo de hoy hablaremos sobre los fregaderos para casas de campo, no sin antes hacer un breve repaso por los tipos de fregaderos que existen en el mercado en cuanto a material y forma. 

Tipos de fregadero

En general podemos pensar que todos los fregaderos son iguales o que su elección carece de importancia porque sirve para algo tan simple como lavar.

Sin embargo existe un tipo de fregadero específico para tus gustos, tu cocina y tu bolsillo. Por ello, es importante elegir bien.

Los fregaderos para casas de campo responden a un diseño que podríamos decir que es característico de ese tipo de viviendas.

Los tipos de fregaderos que veremos a continuación responden a criterios en los que no tiene que ver el diseño. Por lo tanto, un fregadero para una casa de campo puede tener alguna de las siguientes características en cuanto a material o forma. 

Veamos qué tipos de fregaderos podemos encontrarnos en el mercado:

Según el material

Actualmente podemos encontrar fregaderos de muchos materiales. Algunos son más resistentes que otros y generalmente la calidad va unida al precio.

• Acero inoxidable: son los más comunes y, generalmente, más económicos.
• A base de resinas: están disponibles en un gran número de colores y texturas. Sin embargo no son muy resistentes.
• De cuarzo: es el mismo material que se utiliza para las encimeras de cuarzo. Son muy resistentes y además están disponibles en muchos colores y texturas.
• Cerámica: son fregaderos muy resistentes y visualmente bonitos. Son perfectos para el estilo rústico y el vintage.
• Mármol o granito: también son fregaderos muy resistentes, pero hay que tener cuidado con las manchas. Se fabrican especialmente para estar integrados en la encimera. Un bonito fregadero de mármol o granito nos puede recordar a las piletas de lavar de las casas de campo más antiguas. 
• Sintético: son materiales que permiten cualquier tipo de fabricación. Suelen ser fregaderos de diseño más sofisticados y de altas prestaciones. También alto precio.

Según su forma

Hay un fregadero para cada cocina. No te preocupes si tienes un espacio reducido, hay un fregadero adecuado para ti.

• De un seno: son fregaderos muy sencillos donde solo encontramos espacio para lavar. A menudo encontramos también integrado un escurridor.
• De dos senos: son un poco más grandes ya que permite usar un seno para lavar y el otro para escurrir. Además, también puede tener escurridor integrado.
• De esquina: son perfectos para lugares donde el fregadero queda justo en la esquina.

Los senos pueden ser rectangulares, redondos o cuadrados.

Respecto a su posición en la encimera

A la hora de elegir un fregadero debemos prestar mucha atención a cómo vamos a instalarlo en la encimera.

• Fregaderos sobre la encimera o también conocidos como encastrados: generalmente están presentes en aquellas encimeras que no soportan muy bien la humedad, como la madera.
• Bajo encimera o integrados: permiten un mayor aprovechamiento del espacio.

¿Cómo son los fregaderos para casas de campo?

Teniendo una panorámica amplia sobre los diferentes tipos de fregaderos según el material y su forma, así como su tipo de instalación, podemos decir que los fregaderos para casas de campo más habituales son aquellos que son de cerámica blanca. 

Suelen ser de gran tamaño, es decir de dos senos. Además, estos se caracterizan por se profundos asimilándose mucho a las antiguas piletas de lavar. 

Por otro lado lo más característico de los fregaderos para casas de campo es que estos se encuentran encastrados pero sobresaliendo de la encimera por la parte frontal. Permitiendo así que la parte el fregadero se convierta en sí misma en una pieza de decoración.

Pero no solo encontramos fregaderos para casas de campo de cerámica. También encontramos fregaderos más rústicos como los de mármol, piedra o cerámica. 

Este tipo de fregadero sí que son más piletas de lavar que otra cosa. Son perfectas para cocinas rústicas donde puedan tener el máximo protagonismo.

Ambos fregaderos para casas de campo se acompañan de grifos de aspecto antiguo en cobre o bronce. 

Conclusión

Los fregaderos para casas de campo aportan un aire rústico y una añoranza del campo aunque estemos en medio de la ciudad. 

Son fregaderos, a menudo, grandes, robustos y que llaman la atención porque son en sí una pieza de decoración.