La silla Zig Zag de Gerrit Rietveld
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
En el mundo del interiorismo puede encontrarse todo tipo de mobiliario, desde el más vanguardista al más extravagante. No cabe duda de que los diseñadores trabajan en buscar nuevas ideas y otras perspectivas. Un caso particular es la silla Zig Zag, de Gerrit Rietveld.
Bien es cierto que no es fácil incluir producciones como esta silla dentro de la decoración de nuestra casa. Necesita un estilo que se amolde bien al diseño de la misma, siempre sin olvidar la importancia de que exista armonía en toda la atmósfera.
Por este motivo, hay que valorar la originalidad que ofrece Gerrit, teniendo en cuenta que no será fácil incorporar este recurso en una decoración tradicional o clásica, como la que tiene, generalmente, la población. En realidad, se consolida como un elemento innovador y completamente rompedor con los moldes preestablecidos.
Historia en torno a la silla Zig Zag
La silla Zig Zag se realiza entre 1932 y 1934 a partir de los diseños del arquitecto holandés Gerrit Rietveld. En ella plasmará toda la influencia que recibe de las vanguardias históricas que venían desarrollándose desde principios del siglo XX y que eclosionarán en el segundo tercio de este siglo.
Va a ser el cubismo el principal foco de donde beba este arquitecto. Los planteamientos estéticos y el propio desarrollo artístico que promueve esta corriente hace que la silla se convierta en una obra muy interesante. No hay más que ver la manera en que se reducen las formas a la estructura más básica posible.
Hoy en día puede contemplarse en el MoMA de Nueva York. Al ser un diseño original por parte de un arquitecto de renombre, el precio que tiene en el mercado es muy elevado, pudiendo superar los 1.200 euros. Por tanto, no estamos ante un mobiliario que sea accesible para la sociedad.
Esta obra es el fiel reflejo de la evolución del arte hacia la expresión más reducida de las formas.
Expresión estética y significado artístico
A la hora de analizar las características más importantes de este producto de decoración, debemos tener presente los distintos aspectos estéticos que ofrece, además del material y la estructura en sí. Nos encontramos ante un recurso que llamaría la atención en cualquier espacio donde se sitúe.
- La silla se conforma simplemente por cuatro módulos; cada uno tiene una disposición diferente con el fin de que pueda ganar estabilidad y proporcionar, a su vez, funcionalidad. Aunque sea llamativo su aspecto, tiene también una utilidad en el hogar.
- Priman únicamente las líneas rectas, generando estabilidad y combinación de diagonales, verticales y horizontales. Destacan también las puntas que sobresalen en cada parte de forma estridente, con ángulos agudos muy pronunciados.
- A nivel estético se genera una simplicidad estructural muy curiosa. En el fondo, es un mueble realizado de forma muy básica y sin que las partes generen ningún tipo de conflicto, denotando rigidez y tensión.
- Rompe los moldes preestablecidos hasta el momento. Por supuesto, no tiene nada que ver con el mobiliario clásico que predominaba en los hogares de mediados del siglo XX. Este hecho supone que la silla se convierta en un foco de atracción y su aplicación se limita a ciertos estilos vanguardistas.
Funcionalidad y ruptura con los convencionalismos
El principal propósito de Gerrit es desmarcarse de las líneas convencionales del interiorismo. Va a tomar como referencia las corrientes artísticas que están apareciendo en la primera mitad del siglo XX, y va a tratar de sacar el máximo partido de sus principios teóricos.
De esta manera, podríamos definir la idea de este arquitecto bajo los parámetros del movimiento De Stijl, donde artistas como Mondrian o Doesburg trabajaron las líneas rectas, los módulos, las geometrías y los colores.
De ahí procede la idea de constructivismo y neoplasticismo que ofrece esta silla; de hecho, puede tener varias utilidades. Además de servir como asiento, también puede contribuir como mesilla o como estantería individualizada. En otras palabras: es un soporte multifuncional.
Las artes también tienen presencia en campos como el interiorismo.
¿En qué estilos puede encajar la silla Zig Zag?
Puede ser complicado definir el estilo exacto en el que se enmarque a esta silla. No obstante, podemos señalar algunos en los que tiene más sentido que aparezca y que aporte un significado.
Por supuesto, tiene más sentido que esté en los estilos vanguardistas, también en el ámbito modernista, minimalista y, en cierta medida, dentro del campo rústico.
- Van den Eerenbeemt, Marc; Zwikstra, Willemijn: Gerrit Rietlveld: wealth of sobriety, Lectura Cultura, 2008.