Decorar tu salón con un sofá verde
¿Por qué no te atreves con un sofá verde? Los sofás de este color son muy poco utilizados en el mundo de la decoración. A pesar de que se trata de un tono alegre y luminoso, se tiende a pensar que combinarlo y crear armonía con el resto de la estancia es complicado. Para demostrarte que esto no es así, a continuación te proponemos tres formas diferentes de decorar tu salón con un sofá verde. Como vas a comprobar, el resultado es un salón diferente, original y que transmite energía positiva.
Lo primero que tendrás que tener en cuenta es el tono de verde en el que quieres el sofá. Una vez que lo hayas escogido deberás tener claro si quieres que el sofá sea el protagonista de la estancia o quede integrado en ella y no sea tan vistoso. Con estas tres propuestas seguro que encuentras la inspiración necesaria para crear tu propio salón.
1. Sofá verde lima, protagonista del salón
La primera propuesta de decoración con un sofá verde es este estiloso salón decorado en tonos grises, blancos y marrones. Todos ellos son colores fríos y apagados que hacen que tanto el sofá como el sillón sean los únicos protagonistas de la estancia.
El sofá y el resto de la estancia son muy diferentes entre sí y a priori parece que no tienen nada en común. Para unir estos dos estilos tan diferentes y crear armonía en la estancia, se ha optado por una decoración en tonos amarillos, azules y marrones que combinan a la perfección con la alfombra o la planta decorativa de la zona posterior.
Tú decides el protagonismo que le das al sofá
Con un truco tan fácil como este puedes lograr que el sofá destaque por encima de los demás elementos, pero que al mismo tiempo forme parte y sea un elemento más de la estancia.
Otro aspecto importante que destacar en este primer salón que proponemos es la combinación entre el sofá y el sillón. Los dos han sido tapizados con la misma tela, pero cada uno de ellos tiene formas muy diferentes. Aunque no comparten ninguna característica común, al estar tapizados con el mismo color quedan a la perfección en la estancia.
2. Salón próximo a la naturaleza
La segunda propuesta de salón decorado con un sofá verde es totalmente diferente a la primera. Esto es debido a que en el momento de decorarlo se ha buscado todo lo contrario que en el caso anterior. Este salón está íntegramente decorado en tonos verdes y complementado por alguna pincelada de marrón.
El resultado es un sofá verde integrado en el salón. Como puedes comprobar en la imagen, un sofá verde no tiene por qué crear un salón excesivamente llamativo o estridente. Si los elementos próximos son también de este color se logra crear un salón con ambientación natural, acogedor y agradable.
Otro aspecto interesante son los complementos que decoran el sofá. Se ha jugado con los diferentes estampados, colores y texturas y el resultado es simplemente espectacular.
3. Sofá verde oliva en contraste con el blanco
Es innegable que este conjunto de sillón y sofá le dan vida al salón. Una decoración aburrida, neutra y simple puede convertirse en todo lo contrario con una chispa de color. En este caso, el verde le da a la estancia vitalidad, alegría y color.
Para que haya conexión entre los muebles y el conjunto del sofá y el sillón, se han buscado puntos en común. El principal de todos ellos son las líneas rectas y las formas simples. Además, gracias a las plantas de interior situadas a diferentes alturas, se complementa el color verde y se extiende por el resto de la estancia.
Además, para no crear una estancia bicolor, se ha optado por colocar diferentes elementos decorativos de otros colores. Algunos de ellos son los archivadores de la estantería o la mesa de centro.
Seguro que después de haber visto estos tres ejemplos ya no eres tan reticente a comprar un sofá de este color porque, como has podido ver, combinarlo no es tan complicado como parece. Además, el resultado es un salón original y lleno de color.