6 trucos para limpiar la casa en poco tiempo
A todos nos encanta tener el hogar aseado y ordenado, pero no tenemos tiempo como para limpiar la casa como nos gustaría. Eso no significa que debamos resignar higiene ni tampoco todo el fin de semana. En este artículo te contamos algunos trucos para hacer la limpieza en minutos y que quede perfecta.
¿Cómo limpiar la casa rápido y bien?
Quizás pienses que al limpiar la casa rápido no quedará bien aseada o tendrás que repetir el procedimiento día tras día. ¡Nada más alejado de la realidad! Presta atención a los siguientes trucos para acelerar las tareas y que el resultado sea perfecto.
1. Mantén el orden
Es más fácil limpiar la casa si las cosas están en su lugar. Pero para ello, debemos tener el hábito de acomodar cuando usamos algo. Por ejemplo, al terminar de comer, lavar los platos; al bañarnos llevar la ropa al cesto y colgar las toallas o cuando llegamos a casa poner el abrigo en el perchero.
De esta manera, cuando nos dediquemos a la limpieza no perderemos nuestro valioso tiempo poniendo cada cosa donde corresponde, sino enfocándonos en la suciedad como tal.
2. Quita el polvo con un paño húmedo
No podemos hacer nada contra el polvo que se acumula en los muebles y rincones del hogar. Aunque limpiemos a diario, siempre encontraremos. Pero para que dure un poco más el efecto limpio, te recomendamos que lo quites con un paño humedecido con agua y jabón. También puedes aplicar cera para muebles que evita la acumulación excesiva de polvillo y otras partículas.
3. Lava las ventanas periódicamente
Es verdad que limpiar los cristales de las ventanas y espejos lleva bastante trabajo, pero el error que cometemos es hacerlo una vez cada tanto. Si en lugar de ello lo incluimos en la limpieza semanal o quincenal, será mucho más sencillo quitar la suciedad.
La técnica más eficaz para limpiar las ventanas es usar primero un trapo con agua tibia y jabón y luego secar usando bolas de papel periódico. Los cristales quedarán más que brillantes.
4. Enfócate en el baño y la cocina
Limpiar la casa no es una tarea complicada, pero requiere de cierta concentración. Sobre todo, en aquellos ambientes en los que las bacterias están a la orden del día. Nos referimos claramente, al baño y a la cocina.
En estos lugares deberás prestar más atención para que queden perfectos. Antes que nada, te aconsejamos que cambies ciertos hábitos para mantener la limpieza. Por ejemplo, al terminar de bañarte retira los pelos de la ducha o pasa una escobilla cuando el inodoro se mancha.
En la cocina lavar los platos, utensilios y recipientes tras usarlos es una buena técnica, así como también pasar un trapo o esponja húmedos por la encimera y los azulejos después de cocinar.
La limpieza más profunda del horno o de la nevera se puede hacer cada quince días o un mes, siempre y cuando no se manchen con grasa o no se vuelquen líquidos. En ese caso, tendrás que sumarlo a las tareas semanales.
5. Pisos brillantes
Todos los días (o día por medio) deberías pasar una escoba para retirar el polvo y demás suciedad ‘suelta’ como por ejemplo migas de pan, pelos de perro, etc. De esta forma, será más fácil trapear durante la limpieza especial. Te recomendamos si tienes mascota que uses una aspiradora.
Al momento de pasar la mopa o trapo, puedes usar productos de limpieza que se venden en las tiendas y supermercados o bien optar por algo más casero y natural. Un excelente limpiador incluye vinagre, limón y agua. Desinfecta y limpia al mismo tiempo. No te preocupes por el aroma, se irá en cuestión de minutos si abres las ventanas.
6. Una limpieza mensual a fondo
Es verdad que siempre tendremos alguna actividad más divertida que limpiar la casa, pero una vez por mes te aconsejamos que te tomes toda una mañana o una tarde del fin de semana para asear por completo tu hogar.
Nos referimos a aquellos sitios o muebles que no sueles limpiar a menudo: las cortinas, el sofá, los juguetes de los niños, la nevera, el horno, dentro del armario o vestidor… De esta forma, será más fácil y rápido cuando quieras limpiar las semanas siguientes.