¿Cómo saber si tu casa goza de buena salud?
Lo creas o no, nuestros hogares también pueden enfermar, y con ellos, nosotros. La humedad, el exceso de cargas electromagnéticas y los materiales tóxicos son algunos de los factores que pueden afectarnos. Para saber si tu casa goza de buena salud, basta con prestar atención a tus sensaciones, a qué tal duermes y a tu estado de ánimo. ¿Listo para el check in?
La bioconstrucción y todas sus bondades
Actualmente, nos preocupamos cada vez más de tener una casa saludable, y lo hacemos a través de la búsqueda de materiales sostenibles, el respeto por la ecología o la atención en los procesos de producción.
Sin embargo, hay un montón de aspectos que se salen a nuestro control, y un experto en bioconstrucción puede aportarte lo que necesitas a través de un estudio completo para saber si tu casa goza de buena salud.
Para estar seguro de que tu casa goza de buena salud, la bioconstrucción se basa en el uso de los materiales nobles y no tóxicos, la buena distribución de las ventanas para garantizar una correcta ventilación y de tener unos aislamientos que hagan que tanto el calor como el frío se mantengan estables.
Hacen un estudio geobiológico para saber exactamente sobre qué superficie está construida tu casa y cómo podría esto afectarte. En este tipo de estudios se localizan las alteraciones telúricas del subsuelo, los campos electromagnéticos que provocan las antenas de telefonía móvil, instalaciones eléctricas, etc.
Tu casa goza de buena salud con materiales saludables
Siempre recomendamos hacer uso de materiales que estén libres de tóxicos para evitar que nuestra casa se contamine.
La piedra, la madera y el barro son algunos de los materiales que nos pueden garantizar la buena salud de nuestro hogar, existiendo también pinturas ecológicas que tienen muy buen resultado.
Algunos materiales muy de moda en los últimos años están llenos de radioactividad, como el gres, los plásticos o el cemento gris.
Las enfermedades de tu casa y por qué no goza de buena salud
Humedades
Cuando hay humedades en una casa, hay hongos. Estos liberan sus esporas, las mismas que respiramos y nos comemos, causando graves daños en nuestro sistema respiratorio y óseo.
Tóxicos
Las pinturas, disolventes, elementos plásticos, barnices, etc. desprenden contaminantes que afectan a nuestra salud en forma de alergias, asma o bronquitis. Ten en cuenta que lo estás respirando constantemente, de ahí la importancia de poner atención en este sentido.
Carga eléctrica
Cuando tu casa está plagada de electricidad estática, lo notarás, ya que puede que algunos objetos te den calambres. Pero más allá de esta incomodidad, este exceso de energía afecta a nuestro estado de ánimo e, incluso, a la calidad del sueño.
Campos electromagnéticos
Cuando hay una gran carga electromagnética, causada por ejemplo por las ondas que desprende el wifi, las glándulas hipófisis y pineal se ven afectadas y no trabajan correctamente. Estas son las encargadas de regenerar nuestras células, y cuando no ejercen su función, las células se mueren y pueden causar en algunos casos cáncer.
Ahora sí, tu casa goza de buena salud
Hay materiales mucho mejores que el PVC para las instalaciones eléctricas y los desagües. También es importante dejar un buen cableado para evitar fugas electromagnéticas, e intentar que por los cabeceros de los dormitorios no pase ningún cable.
Por otro lado, una vez que tenemos los resultados de los estudios geobiológicos, se sugiere un cambio radical, o al menos, una redistribución de la casa para disminuir el impacto que todos estos agentes nocivos tienen en nuestra salud.
Podemos conseguir una casa saludable reformándola de arriba abajo, pero sabemos que eso no siempre es posible. Un estudio de este tipo sí que podrá darte información valiosa acerca del estado de la salud de tu hogar, y te ayudará a buscar las soluciones que mejor se acoplen a tus posibilidades.
Aunque una casa sana puede resultar más cara en un primer momento, piensa que es el lugar en el que pasarás más tiempo, y si eso repercute en tu salud, ¿no crees que merece la pena invertir un poco más?