El arte en casa: cómo acertar al colocar cuadros en la pared
Escrito y verificado por la técnico en Decoración de Interiores 3D Sonia Budner
A la hora de terminar de decorar la casa, siempre hay que afrontar la difícil tarea de elegir y ubicar correctamente cuadros, obras de arte o colecciones de láminas o fotos. Colocar cuadros en la pared es un arte que terminará de dar el toque de diseño profesional a tu casa.
Algunos espacios requieren diferente tratamiento cuando comenzamos a colocar cuadros en la pared. Las estancias modernas poseen grandes paredes que parecen imposibles de llenar. O, por el contrario, a veces tenemos una bonita colección de láminas pequeñas que no sabemos cómo organizar en la pared correctamente.
¿Cómo saber a qué altura colocarlos? ¿Dónde se ven mejor? ¿Deberías colocar solo uno o varios en la misma pared?
Con estas ideas y consejos te resultará mucho más sencillo llevar a cabo esta tarea. Tus cuadros y colecciones lucirán perfectos y aportarán coherencia a la estancia, carácter y una buena dosis de tu propia personalidad.
Dando vida a tu casa al colocar cuadros en la pared
Las obras de arte, sean grandes o pequeñas, los cuadros y las láminas son grandes aliados de la decoración. Nuestro consejo es que no te dejes intimidar por el tamaño de la pared. Piensa ante todo que serán imágenes que verás constantemente, así que es mejor que te decidas por piezas que despierten tus emociones.
Al mismo tiempo tenemos que valorar el tamaño de la pared a la que queremos dar vida. Si la pared es pequeña, es mejor elegir piezas también pequeñas o medianas. De esta manera no recargamos la pared.
Si, por el contrario, dispones de una pared grande, puedes decidirte sin problema por cuadros de grandes dimensiones o por varios de mediano tamaño.
Los cuadros son elementos decorativos que nos sirven para todas las estancias de la casa. Los pasillos, los dormitorios, las salas de estar, cocinas y baños… Todos se beneficiarán del toque personal y el encanto que aportan las fotografías o los cuadros. Eso sí, elígelos en función del espacio que vayan a llenar para que la temática no desentone con la función de cada habitación.
Altura a la que colocar cuadros en la pared
Esta es una de las claves más importantes cuando hablamos de colocar cuadros en a pared. La norma general es situarlos a la altura de los ojos, aunque esta norma tiene muchas variantes dependiendo del tamaño del cuadro y de la pared y del efecto que queramos conseguir con la composición.
Hay una regla en diseño de interiores con la que nunca fallas en relación a la altura a la que debes colocar cuadros o fotografías en la pared: que queden alineados más cerca del mueble que tengan debajo que de la distancia que tengan hasta el techo. De otra manera, los cuadros parecerán estar fuera de lugar.
¿Cómo los distribuimos?
Esta es otra de las cuestiones en las que un error puede arruinar la estética completa de la habitación. Conviene no precipitarse al colocar cuadros en la pared antes de tener muy clara la distribución final de los muebles. Cualquier cambio en la ubicación de un mueble puede echar a perder la composición de cuadros elegida.
Cualquiera que sea la composición final elegida, el resultado resultará armónico y equilibrado si podemos trazar imaginariamente una línea que cruce los cuadros por el medio.
A partir de esa línea, los cuadros deberían quedar a una altura promedio del suelo. Esa es la señal por la cual sabremos si la composición está bien montada.
Paredes con un solo cuadro
En la paredes en la que hayamos decidido colgar un solo cuadro debemos seguir unas pequeñas pautas para que el resultado final funcione. Deben quedar centrados y armonía con el resto de los elementos decorativos de la estancia.
El cuadro debe ser más estrecho que el mueble que tenga justo debajo. Nunca debe ser más ancho que el sofá o el aparador que queda debajo. Es la regla de los dos tercios.
Si, por ejemplo, el sofá mide 3 metros, el cuadro colocado encima de él debería tener 2 metros de ancho y estar colocarlo de forma horizontal. Si el cuadro es vertical, roba todo el protagonismo al sofá. Por lo tanto, es una cuestión de saber a qué pieza queremos darle protagonismo.
Si son varios cuadros
Si los cuadros elegidos son varios, tenemos muchas opciones para realizar una composición perfecta. Podemos colocarlos en vertical, en horizontal, en nube. Todas las composiciones resultarán válidas si mantenemos el equilibrio.
Para agrupar cuadros, debemos ser muy cuidadosos con la separación que dejemos entre ellos. A no ser que se busque otro efecto de manera intencional, la regla a seguir es a mayor tamaño de los cuadros, mayor distancia entre ellos debemos dejar.
El hilo conductor
Cuando creamos composiciones de varios cuadros, debemos seguir un hilo conductor que los relacione todos. Puede ser la temática, el color o cualquier elemento que tengan en común. Debemos desechar las composiciones que no tengan ese elemento en común porque, estéticamente, no funcionará.
Aún así, no le tengas miedo a mezclar cuadros; busca el punto en común y diseña varias formas diferentes de colocarlos juntos, deja reposar la idea unos días y, finalmente, encontrarás la forma correcta de vestir las paredes de tu casa.