El estilo french country: el rústico más chic
Escrito y verificado por la técnico en Decoración de Interiores 3D Sonia Budner
Hay una magia inherente a la decoración rústica que ofrece el efecto inmediato de sentirse en el hogar. Si a esta estética le incorporamos el delicado gusto francés por las formas y los colores, conseguimos el estilo french country, el más chic de los looks rústicos.
Hasta la casa más urbana cobra vida y sabor a campo con este estilo. Las molduras, los tonos tierra, los amarillos mostaza y los rojos más cálidos llenan estos espacios infundiéndoles vida y calor.
Los estampados toile, las flores en las tapicerías y los motivos de animales de granja le aportan el estilo clásico que buscamos en el french country. Como si estuviéramos en una maravillosa casa escondida en el más precioso pueblo francés.
Nos vamos de viaje a la Provenza y a la campiña francesa sumergiéndonos en los campos de lavanda. La sensación cálida e informal de este estilo se adapta bien a cualquier tipo de casa. Solo necesitamos conocer algunas claves e incorporar sus elementos a nuestra decoración.
Los colores del french country
Este es uno de los estilos que utiliza más colores en la decoración. Lo ideal es que aparezcan todos ellos, y que la combinación y la cantidad sean acertadas. Tenemos colores que evocan el sol, como los amarillos y los tonos oro suaves, el rojo oxidado, etc.
También los que insinúan las praderas y la caza, como los verdes hierba o el verde oscuro. Todos ellos se mezclan y combinan con los colores del cielo limpio y el de los océanos, como los azules agua.
Los grises brillantes y los negros se utilizan para definir los colores llamativos y aportarles contraste y relieve. Los muebles gustan de los tonos del metal oxidado, así como los accesorios de iluminación.
Los interiores
Las texturas de las paredes, suelos y techos del french country destacan por sus materiales, como el yeso pálido en paredes y techos cruzados por vigas de madera oscura que caracterizan también los suelos y los muebles bellamente tallados.
Las coloridas telas estampadas provenzales se mezclan con las tapicerías lisas en tonos naturales. Los materiales naturales son unos de sus elementos más importantes. Las paredes de yeso pueden teñirse en colores tierra. Los respaldos de sillas y sillones en tejido de red son otro elemento característico.
En los suelos encontramos también la piedra natural, y están cubiertos por grandes y abrigadas alfombras de lana o algodón. La piedra es un elemento recurrente del french country que encontramos también en sus grandes chimeneas, mezclándose con azulejos cerámicos decorados.
Las chimeneas del french country están magníficamente adornadas con ramos de hierbas provenzales, ollas de cobre y multitud de accesorios de hierro. Son lugares perfectos para acurrucarse, leer y vivir momentos mágicos.
Los muebles de estilo french country
Estas estancias se llenan con muebles rústicos de paneles curvos, hermosos ornamentos tallados artesanalmente y mucha madera sin tratar. No faltan los armarios de todo tipo. En este estilo todo se guarda, ya sean vestidos, ollas, vajillas, toallas o ropa de cama.
Otra pieza clave son las grandes e importantes mesas de comedor, que pueden ser redondas o rectangulares y acabadas muy rústicamente. Los elementos curvos se añaden en las siluetas de las sillas, generalmente de estilo ladderback. Los muebles del estilo french country están llenos de incrustaciones en hierro forjado.
Los tejidos
Los maravillosos colores de la campiña francesa se agregan aquí a través de las telas, las tapicerías y los complementos decorativos textiles. Los tradicionales tejidos estampados combinan bien con cuadros básicos y rayas.
En los tejidos florales, los colores predominantes son los verdes, los anaranjados y los tonos lavanda. Los motivos decorativos en los textiles evocan la vida en la granja y se llenan de aves, girasoles, aceitunas, uvas y lavanda, aplicándose en tapicerías, manteles y cortinas.
El toile es el diseño tradicional por excelencia del rustico francés. Sobre fondo de algodón o lino blanco o beige se imprimen motivos de escenas campestres en un solo color de contraste, que suele ser el rojo, el rosa fuerte, el azul, el negro o el verde.
Los complementos del french country
Este es un estilo rústico tremendamente inspirador. Utilizaremos grandes cestas o canastas tejidas en alambre, jarras metálicas antiguas, utensilios de cobre, los azulejos, la cerámica, las piezas talladas en madera…
Multitud de pinturas y cuadros adornan las paredes, y sus temas son campestres, preferentemente antiguos y con dominio de los colores oscuros. Estas casas french country están llenas de flores por fuera y por dentro. Los geranios y la lavanda no pueden faltar en el interior de una estancia decorada en este estilo.