El estilo modernista para tu hogar
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
¿Estás pensando en cambiar la decoración de tu hogar?, ¿Te has comprado una casa nueva y no sabes qué diseño de interior hacer? Te mostramos algunas ideas sobre el estilo modernista para tu hogar.
En el fondo, a todos nos gusta cambiar y hacer de nuestro hogar un lugar interesante, donde no solo haya cuatro muebles contados de un solo estilo. ¿Por qué no hacer de tu casa un espacio de diseño innovador y a la vez que recupere un período artístico?
El estilo modernista puede aplicarse tanto dentro como fuera de la vivienda. Esta corriente artística no tiene por qué estar únicamente en una habitación; en realidad, puede encontrarse en otros lugares de la casa, incluyendo la fachada.
El estilo modernista: datos históricos
El estilo modernista o modernismo tiene su origen a finales del siglo XIX y principios del XX. Dependiendo del país donde tuviese su desarrollo recibe un nombre u otro, como por ejemplo en Francia que se llamó Art Nouveau y en Alemania era el Jugendstil.
En España tuvo la denominación de Modernismo, debido a que se considera un arte nuevo, que rompe los estereotipos propios del neoclasicismo y ofrece una imagen renovada del arte recibiendo una clara inspiración de la naturaleza.
Se está produciendo una ruptura con el academicismo y se fomenta la libertad creativa de cada artista. Las fórmulas clásicas se rompen para dar fruto a la imaginación y las formas plásticas; se acaba, así, con el realismo.
– En la obras plásticas la armonía nace de la luz, que da relieve y decora.-
-Antoni Gaudí-
Modernismo aplicado a la decoración
El modernismo afecta a todas las artes, pero hay una en la que incide de manera directa: la arquitectura. En ella se consolida el modernismo teniendo en cuenta que el continente puede estar en relación con el contenido.
- El mobiliario es el punto fundamental sobre el que trabajar. La técnica del modernismo puede reflejarse muy bien a través de las mesas, sillas, lámparas, armarios, etc.
- Escaleras: en estructuras arquitectónicas como las escaleras se puede aplicar un contenido modernista, tanto en escalones como barandillas.
- Decoración pictórica: por supuesto, pueden disponerse cuadros pictóricos en las paredes; pero, a su vez, por qué no decorar las paredes también con representaciones modernistas, como por ejemplo formas vegetales esquematizadas.
- Utilización de vidrieras: los cristales también son un recurso interesante sobre el que trabajar, aplicando vidrios de colores y formas sinuosas o curvas. Se dinamiza mucho la decoración y la luz hacia el interior.
Mobiliario modernista
Los muebles son el principal foco donde trabajar el modernismo; serán más vistosos y ofrecerán una visión notable de lo que es este estilo y su repercusión dentro del hogar.
- Mesa y sillas del comedor: patas y respaldos sinuosos. Se debe dejar a un lado la rectitud para intentar ofrecer una imagen vegetal, como si hubiesen nacido directamente de la naturaleza.
- Espejos: marcos con formas curvas, sin que haya líneas rectas y tratando de jugar con la sinuosidad. Hará que el espejo tome protagonismo en cualquier parte de la casa donde lo cuelgues.
- Plantas en maceteros: es importante que haya macetas con plantas, flores, bonsáis u otros tipos. Lo que se debe de conseguir es entablar un diálogo con el resto de decoración, siempre bajo preceptos naturales.
- Marcos de fotos y cuadros: de nuevo, aplicación de formas sinuosas, tanto en madera como en hierro.
Las escaleras: adecuación a este estilo
Las escaleras se convierten en un componente fundamental de las casas con dos pisos, ¿por qué no trabajar sobre ellas el diseño modernista?, ¿Qué podría hacerse en ellas?
- Siguiendo diseños de Gaudí, pueden hacerse peldaños curvos, simulando una cascada de agua. Para ello hay que desproporcionarlos, es decir, hacerlos curvos y que en la zona central sean más anchos que en los extremos.
- Barandillas sinuosas donde puede trabajarse tanto la madera como la forja. El principal objetivo es mostrar una representación vegetal donde el propio trabajo que se haga del metal haga atraer todas las miradas.
La fachada de la casa
En la fachada pueden aplicarse otros elementos sutiles e interesantes, tales como columnas o ménsulas como rostros humanos o vegetales y estructuras voladizas que sobresalgan.
Las ventanas pueden tener encuadres curvos y elegantes. A su vez, se complementarán con la madera de los marcos de los cristales.
Por tanto, el modernismo se consolida como un estilo que posee caracteres elegantes y originales, muy diferente a las tendencias clásicas que tanto se han trabajado durante la historia del interiorismo.
Polo García, Victorino: El Modernismo. La pasión por vivir el arte, Barcelona, Montesinos Editor, 1987.