Ideas para una decoración de un bar rústico
Decorar correctamente un establecimiento puede ser, en muchos casos, motivo de éxito o fracaso en un negocio. Sí, porque además de los productos o servicios que se ofrezcan, el estilo que tenga el lugar hará que los clientes tengan una mejor experiencia y regresen o lo recomienden entre sus conocidos.
Si quieres lograr una decoración de un bar rústico y que quede más que bien, te aconsejamos que leas el siguiente artículo; donde te contaremos de qué manera conseguir el efecto deseado y que todos estén a gusto cuando van de copas con amigos.
Cómo decorar un bar
A la hora de equipar y decorar un bar, sin importar de qué estilo sea, lo primero que debemos tener en cuenta es qué imagen queremos dar a conocer como empresa a nuestros clientes.
Para transmitir un concepto o una idea, podemos utilizar diferentes herramientas y más allá del menú, tenemos que trabajar muy duro para que esa ‘primera impresión’ sea espectacular.
Se dice que todo ‘entra por los ojos’, y si nuestro bar está decorado a tono con el estilo de los usuarios, el éxito está casi asegurado. Es muy difícil cambiar la perspectiva o la opinión que alguien tiene de un lugar una vez que se ha hecho una ‘idea mental’ de él.
Por ello, sea cual sea el diseño o el estilo que le queremos imprimir a nuestro negocio, es muy importante que le prestemos la atención que se merece y que no dejemos ningún detalle librado al azar. ¡Sobre todo en la actualidad, donde las imágenes y vídeos son los que mandan!
Ideas para la decoración de un bar rústico
No hay dudas de que uno de los estilos más usados en los últimos tiempos para bares, restaurantes y cafeterías es el rústico.¿A qué nos referimos con rústico? A esos sitios donde la calidez, el confort y la añoranza se combinan para una experiencia inolvidable.
Se ha creado un estilo muy especial en torno a lo que se conoce como ‘rústico’ gracias a la utilización de ciertos objetos, muebles o colores.
Un bar de estilo rústico no tiene por qué ser algo anticuado, oscuro ni sombrío… ¡Todo lo contrario! Es lo que muchos buscan en invierno para quitarse el frío y pasar un rato en una atmósfera hogareña y acogedora. Y en verano, los materiales naturales le darán ese frescor que necesitas para acompañar con una cerveza o cualquier otra copa.
Una decoración de un bar rústico debe contar con materiales naturales -madera y piedra básicamente- con los cuales podamos sentirnos ‘como en casa’. Si un cliente está cómodo y lo pasa bien, es probable que consuma más y recomiende el establecimiento a sus conocidos y amigos.
La madera puede estar presente en las mesas, las sillas, la barra y hasta en el techo o las paredes. Los materiales nobles son estrellas en el estilo rústico, pero no debes abusar de ellos. Mejor si los combinas con otros, como por ejemplo el hierro, el ladrillo o el mimbre.
Colores destacados
En cuánto a los colores, elige tonos más cálidos: marrón, naranja y amarillo pueden ser una excelente apuesta. Por supuesto, no te olvides de algunos detalles en blanco, para que el ambiente parezca más grande (es increíble el efecto que consigue una pared clara en establecimientos pequeños).
Otra cuestión que no debes dejar de lado es el estilo de los acabados de los materiales. No dudes en colocar listones de madera sin lijar, piedras con cantos no redondeados, telas con fibras gruesas… Todo eso dará la sensación de estar en un lugar más auténtico, más hogareño y no tan ‘decorado para las fotos’, como suele suceder en ciertos bares actuales.
Por último, te recomendamos que hagas una combinación entre dos estilos que están bastante de moda hoy en día: el rústico y el industrial. Tendrás una impronta diferente al resto de los restaurantes o bares de los alrededores, eso seguro.
Para poder disfrutar las ventajas de ambas corrientes, además de lo explicado antes en torno a la madera, puedes añadir algunos elementos de metal o hierro forjado: sillas, lámparas, macetas, etc. ¡Quedará perfecto y tus clientes estarán más que felices pasando sus horas en el bar!
Moraleda, A. (2004). La innovación , clave para la competitividad empresarial. Universia Business Review. https://doi.org/10.1016/j.cede.2011.07.004