Las placas de gas para la cocina
La placa de gas es la opción más recurrente en las cocinas profesionales y, sin duda, la preferida de los amantes de la cocina.
Con las placas de gas conseguimos cocinar a fuego lento, la comida tiene un sabor especial que no se puede conseguir con otro tipo de cocinas como vitrocerámicas o inducción. En el artículo de hoy te mostramos todas las ventajas de las cocinas de gas.
Ventajas con respecto a otro tipo de placas
La primera ventaja que encontramos con respecto a otras, es que calientan más rápido y son más económicas, ya que el coste del gas natural es inferior al de la energía eléctrica. Esto es un factor clave en las cocinas profesionales ya que pueden realizar cambios bruscos de temperatura con mayor facilidad.
Además admite un montón de utensilios de cocina, el calor es muy estable, permite controlar la intensidad de la llama, y es el mejor sistema para cocciones lentas. No será necesario que adquieras piezas aptas para inducción si no tienes intención de utilizar este sistema. Además, el menaje tradicional es más económico, y te permitirá ahorrar dinero.
El diseño de este tipo de placa es mucho más estética y segura que antes. Ofrecen una mayor estabilidad y superficie de apoyo a los recipientes.
Muchas de ellas, como veremos, incorporan un autoencendido integrado. Te podrás despedir de las cerillas y mecheros. Además, el sistema de seguridad ha mejorado mucho, con respecto a las antiguas, ya que en los quemadores se cierra el paso del gas en caso de detectar ausencia de llama. Aceptan tanto gas natural como gas butano.
Diferencia entre placas con gas butano y gas natural
En primer lugar, en las placas de gas natural no hay una bombona que suministre el gas. Se obtiene el gas de forma ilimitada, según lo que cocinemos. En cambio, las placas a gas butano sí necesitan una bombona de gas y cambiarla cada cierto tiempo. Cargar con la bombona puede ser un gran inconveniente.
No obstante, las placas a gas butano son más económicas que las placas de gas natural. Esto se debe a que las bombonas de butano son muy baratas, rondan los 12 euros y suelen durar un mes, lo que nos permite ahorrar bastante.
Como el gas también se utiliza para calentar el agua sanitaria, es recomendable que hagas cálculos porque a partir de ciertas cantidades consumidas, puede salirte igual de rentable el gas natural que el gas butano.
Cosas que hay que saber antes de comprar
Las placas de gas tienen un menor consumo energético que otro tipo de placas. Además, te permite preparar diferentes comidas de una forma más tradicional sin alterar las propiedades de los alimentos.
Antes de proceder a la compra, has de tener en cuenta ciertos aspectos de este tipo de placas.
- En primer lugar, tienes que determinar el uso que le vas a dar. Si cocinas habitualmente o solo es para momentos esporádicos. De esto dependerá el número de quemadores. Debes elegir el número según cuántas personas residan en la vivienda y las dimensiones de la cocina. Las placas que nosotros aconsejamos son las de 3 quemadores ya que son las más cómodas y prácticas.
- La higiene de este tipo de placas es muy importante, por eso, opta por una placa de gas que te permita mantener limpios los fogones.
- Asegúrate que tiene la opción de autoencendido ya que debido a la normativa vigente, todas deben llevarlo así como un sistema de seguridad que corte el flujo de la llama si la misma se apaga.
- Comprueba que la placa puede regular la llama para poderla poner con mayor o menor intensidad según el tipo de plato que queramos preparar.
- El modelo cristal-gas es de los más recomendables para quienes buscan una estética moderna y fácil de limpiar. Los modelos fabricados con hierro fundido también son recomendables ya que son más duraderos y resistentes.
Precios de las placas de gas
Dependiendo de las dimensiones, marca, funciones y extras que incluya, el precio variará siendo más caro o más barato.
Normalmente, los precios oscilan entre los 20 y 1500 euros. Por eso, aconsejamos que adaptes tu presupuesto en base a la placa que desees, teniendo en cuenta que muchas veces lo barato se acaba estropeando antes y no lo terminas de amortizar.
Inconvenientes
El primer inconveniente que encontramos en este tipo de placas es que son más difíciles de limpiar. No obstante, cada vez están saliendo al mercado más placas de gas con mayores facilidades de limpieza para que nos resulten más cómodas.
Al usar fuego directo, son más peligrosas y por tanto, menos seguras. Puedes quemarte cuando tengas algún descuido e incluso dejarte encendido el gas.
Conclusión
Todas las placas de cocción tienen sus pros y sus contras. Por eso, deberás optar por la que mejor se adapte a tus necesidades.
A pesar de ello, el sabor de la comida tradicional hecho a fuego lento con placas de gas, no lo conseguirás con ningún otro sistema.