4 maneras de mejorar las cortinas
Las cortinas tienen muchas funciones, además de evitar que se filtre la luz del sol o que se vea el interior de la vivienda. Pueden servir como decoración y darle otra vida a los ambientes. En este artículo te damos algunos consejos para que puedas mejorar las cortinas y se conviertan en protagonistas de tus espacios.
Las cortinas son clave
No solo nos referimos a la decoración, sino también a la funcionalidad. Las cortinas son un elemento que no puede faltar en el hogar. Si bien algunas personas desestiman su rol, lo cierto es que sirven para evitar la entrada del sol y para proteger la intimidad de la vivienda. Y como si eso no fuese suficiente, también son perfectas para darle vida a un ambiente.
Por ello, elegir las cortinas es fundamental. No se trata de un simple accesorio o de una tela puesta en la ventana. ¡Tienen la capacidad de vestir las estancias!
Clásicas
Ideales para ambientaciones elegantes y convencionales. Quedan bien tanto en una sala, como en una habitación, en un escritorio o en la cocina. Es una manera clásica de vestir la ventana.
Roller
Son más modernas, se emplean para evitar las persianas y tienen la particularidad de que al estar cerradas, el ambiente queda oscuro. Algunos optan por añadir una cortina clásica adelante, solo para decorar.
Blackout
Uno de los must en la decoración actual -que no lleva persianas-, y que queda bien tanto en entornos rurales, como urbanos. La cortina blackout logra oscuridad total y no permite ningún destello de luz del exterior.
Romanas
Se trata de un panel de tela que se pliega de manera vertical y forma una especie de acordeón debido a su sistema de varillas cosidas dentro de la tela. Se maneja manualmente con un cordón. Similares en sistema están las cortinas americanas o venecianas, más usadas en ambientes profesionales.
Consejos para mejorar las cortinas
Ahora que ya sabes cuáles son las principales opciones, es momento de que pongas manos a la obra. ¿No sabes cómo mejorar las cortinas de tu casa? Aquí te damos algunas recomendaciones.
1. Añade contraste
Dos cortinas quedan mucho mejor que una. Y como hoy en día podemos encontrar de cualquier color en el mercado, la decoración se hace más fácil (o más difícil, ya que debemos hallar la combinación que más nos guste).
Para añadir contraste podemos, por ejemplo, colocar una cortina clara detrás y encima una oscura. Esta última sujetarla en los laterales para decorar el ambiente. Otra manera de generar contraste si no queremos usar dos pares de cortinas, es comprar paños oscuros si la pared es clara y viceversa.
2. Opta por diferentes largos
Si quieres mejorar las cortinas, quizás lo que necesitas es que sean más largas del tamaño de la ventana. ¿Para qué? Para crear un ambiente más elegante o, incluso, dar la sensación de que allí hay un balcón o una puerta.
Las cortinas con mayor longitud le darán a la estancia un aspecto más formal.
3. Elige un patrón
Quizás hayas visto en algunas revistas de decoración estancias que tienen las cortinas haciendo juego con los cojines del sofá, con la alfombra o con las lámparas. Eso lo puedes lograr comprando la misma tela y ocupándote de que todo quede combinado.
También puedes ser menos detallista y elegir patrones lineales que puedan combinar con varios elementos del ambiente.
4. Juega con las texturas
Hoy en día podemos encontrar cortinas de diferentes materiales que queden perfectos con los del sofá, por ejemplo. Un caso de combinación ideal es cortina de lino o seda y sofá de terciopelo. ¡Haz la prueba!
Si tienes sofá de cuero, puedes mejorar las cortinas eligiendo telas como el algodón. E, incluso, darle una mayor calidez al ambiente con cortinas de alpaca.
Un último consejo: ten en cuenta que cada espacio requiere de su propia cortina. No es cuestión de comprar al por mayor para todas las ventanas que tenemos. Todas las aberturas necesitan un cortinado específico, más allá del color o diseño de la tela. ¡Así es como logras estancias amigables y cálidas!