Los muebles retro más demandados en el mercado
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
¿Quién ha dicho que la decoración del pasado ha quedado desfasada? Hoy en día, está ganando mucha fuerza la tendencia vintage. Socialmente, se ha mirado hacia los diseños de décadas pasadas para aportar un contenido diferente. Por eso, vamos a conocer cómo son los muebles retro más demandados en el mercado.
Vivir en el siglo XXI no quiere decir que debamos seguir únicamente las líneas estéticas actuales. Se puede recurrir a los modelos ya existentes sin que perdamos comodidad y buena presencia. En el fondo, lo antiguo se puede convertir en algo moderno.
En ningún momento hay que desechar los muebles de nuestros antepasados, ya que pueden proporcionar un ambiente distinguido y sofisticado. La vuelta a las ideas que ya se trabajaron anteriormente ofrece un toque más sutil y diferenciado.
¿Qué son los muebles retro?
Si tuviésemos que definir qué son este tipo de muebles habría que partir de la siguiente idea: recursos que muestran planteamientos estéticos ya trabajados en épocas pasadas y que transmiten un carácter vetusto.
En realidad, es como si se actualizase su condición artística; es decir, cualquiera de estos elementos que, supuestamente, habían pasado de moda regresan con más fuerza para volver a ocupar espacios en casa.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que las corrientes estéticas son cíclicas y vuelven a estar presentes pero con objetivos diferentes.
En el mundo de la moda, ocurre exactamente igual. Se tiende a llevar de nuevo algunas prendas que parecían obsoletas aunque la originalidad queda presente. De este modo, podemos decir que en el interiorismo se aplican conceptos semejantes.
Lo retro vuelve a estar presente.
Muebles retro más demandados en el mercado
Hay algunos modelos que están teniendo un gran éxito. Esto se debe, probablemente, a la capacidad polivalente que ofrecen y la importancia que adquieren en los interiores. Vamos a conocer los más relevantes:
- El mueble del televisor es uno de los más vistosos. Suelen ser horizontales, con algún cajón, armario u otros estantes abiertos donde introducir cosas. No tienen demasiada altura pero ocupan un espacio considerable en longitud.
- Hoy en día, las cómodas no son tan habituales en los dormitorios; sin embargo, proporcionan un estilo verdaderamente singular, sobre todo aquellas que tienen una imagen anticuada y algo desgastada.
- Por supuesto, los muebles restaurados como armarios, mesas o sillas son una buena apuesta. No hay que olvidar que deben ofrecer esa imagen tradicional y, a su vez, no perder la funcionalidad.
- Las vitrinas de cristal tampoco tienen mucho recorrido en la actualidad, ya que se ha perdido la idea de mostrar las vajillas y otros utensilios. No obstante, se les puede dar otro uso introduciendo objetos decorativos, trofeos, fotografías, etc.
- En cuanto a los aires pop que se reflejan en los muebles de los años 60 y 70, es en el dormitorio, la cocina o el salón donde pueden alcanzar originalidad y un toque vintage. Se caracterizan por ser básicos y sencillos, de líneas plásticas y curvas, pero sin perder la eficacia en su utilidad.
Sofás y butacas: una vuelta a los formatos básicos
En cuanto a los asientos, hay que considerar un aspecto fundamental: la vuelta de diseños sencillos y básicos. En otras palabras, la búsqueda de los volúmenes elementales que no destaquen en exceso y donde prime más el color que la forma.
Los tonos llamativos y vibrantes, al igual que la suavidad de las líneas, quedan presentes. Es una manera diferente de trabajar la decoración reutilizando los modelos del pasado.
De esta manera, se alcanza una proceso alternativo y diferente en comparación con los típicos sofás y butacones que encontramos en el mercado. No cabe duda que, si queremos ser originales, lo retro se consolida como una muy buena oportunidad.
La mitad del siglo XX es una fuente de inspiración
Los muebles retro más demandados son aquellos que ocupan un lugar especial en el hogar. A pesar de ser sencillos y funcionales, toman protagonismo por la estética. Es el propósito que se perseguía a mediados del siglo XX.
Los interioristas de esa centuria trataron de aplicar conceptos funcionales que, a su vez, transmitieran serenidad y entusiasmo. Así se demostró, fundamentalmente, en las viviendas de clases medias, siendo el salón el principal campo de trabajo.
En conclusión, podríamos decir que la vuelta a los modelos retros nos ayuda a sentir un soplo de aire fresco, suponiendo un contraste con los diseños actuales.
- Wilson, Judith: La casa vintage: tesoros con estilo para un hogar muy chic y actual, Océano Ámbar, 2009.