Técnicas para el envejecimiento de muebles
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
En el mundo de la decoración, no todo consiste en aportarle al mobiliario un sentido perfeccionista con colores lisos y un aspecto reluciente; también pueden trabajarse las técnicas para el envejecimiento de muebles, ofreciendo una estética vintage.
En el fondo, a todos nos gusta estrenar decoración y que se amolde al diseño de la casa, pero también es cierto que se puede trabajar desde otro enfoque y convertirse en un recurso atractivo, diferente y original.
Aunque no es habitual encontrar en tiendas muebles con apariencia envejecida, puedes hacerlo por ti mismo en casa, de una manera fácil y sin complejidades. Si realmente quieres darle un giro estético a tu hogar, esta técnica puede servirte de mucho.
La estética de lo antiguo
Probablemente hayas escuchado que lo vintage está de moda. En realidad sí, pero no toda la decoración que remite al pasado o que tiene apariencia antigua es vintage. Por tanto, hay que saber matizar y entender que no todo se incluye en esta corriente.
Los muebles con apariencia antigua no tienen por qué ser algo vintage, simplemente son un elemento que tuvo un uso pasado, es decir, como si ese mueble haya sido utilizado durante mucho tiempo y ahora no pierde su valor.
De esta manera, lo que se está haciendo es decorar con una apariencia antigua, sin perder la funcionalidad y aportando una estética original. Difiere mucho de los muebles más nuevos y se convierte en un elemento que encaja a la perfección en el ámbito rústico.
– Que un mueble esté viejo no quiere decir que ya no se pueda utilizar.-
El efecto ‘chalk’ para el envejecimiento de muebles
Una manera muy interesante de trabajar el mobiliario es a través de la técnica del efecto ‘chalk’. Este sistema es sencillo y aplicable sobre muebles nuevos a los que se les quiere dar un aspecto envejecido y usado.
- Lija la superficie de madera del mueble con una lija de grado medio para que no destroce la superficie.
- A continuación, para conseguir un efecto pátina envejecido, se ha de mezclar pintura blanca o de otro color con agua, es decir, es un proceso de disolución.
- El siguiente paso es pintar toda la superficie con este tono blanco. La idea es que no quede demasiado espeso el blanco, sino más bien débil.
- Para conseguir el efecto desgastado, debes pasar una esponja en la dirección de las propias vetas de la madera. Comprobarás que hay partes más blancas que otras, incluso queda algo disperso y diluido el color.
- Es importante que se vea bien la madera y que el color no oculte el mueble.
La técnica del ‘decapé’
Otra fórmula muy utilizada y creativa es a través del desgastado, que se puede conseguir mediante el levantamiento de pintura:
- Diluye pintura con agua y después pinta la superficie del mueble sin dejar ningún espacio al descubierto. Se deja secar y ya quedaría todo dispuesto para el siguiente paso.
- Después, se coge una vela, se pasa por la superficie con el fin de que queden restos de cera.
- A continuación, se pasa una capa de esmalte al agua. Eso sí, interesa que sea un color diferente. Por ejemplo, si el anterior ha sido verde, este puede ser blanco o marrón. Se deja secar, comprobando que la superficie está dura.
- Finalmente, se pasa una lija por la superficie, de tal manera que se desprenderán partes del esmalte por donde han quedado restos de la cera.
- En el caso de que se le quiera dar mayor sensación de envejecimiento y desgaste, se puede aplicar betún de judea muy difuminado.
– Lo viejo también puede llegar a ser algo nuevo.-
Lijado sencillo
Una fórmula bastante sencilla y rápida es mediante el lijado de la superficie de un mueble de madera. Simplemente hay que utilizar una lija para ir poco a poco desgastando la superficie.
La finalidad es que se aprecie un deterioro superficial, con partes más desgastadas que otras. Se ha de realizar siempre en la dirección de las vetas de la madera. El tablero superior puede ser pintado y no lijado, por si va a ser una mesa de mucho uso.
Si se desea, puede aplicarse barniz y que quede, así, más protegido el mueble. De todos modos, cualquier desperfecto o desgaste natural que se produzca puede ayudar a que el envejecimiento siga su curso.
Nutsch, Wolfgang: Tecnología de la madera y el mueble, Reverté S.A., 2000.