Las mejores plantas para decorar la casa en invierno
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
El mundo de la jardinería tiene sus peculiaridades, sobre todo si hablamos de su aplicación en los interiores. Por eso, te mostramos las mejores plantas para decorar la casa en invierno, teniendo en cuenta cuáles son estéticamente más interesantes y qué características tienen.
No todas las plantas soportan los cambios de temperatura de nuestras casas en esta estación de año. Hay que tener en cuenta que durante muchas horas del día tenemos la calefacción puesta y, por las mañanas, suele hacer más frío al tenerla apagada.
Por este motivo, es preferible seleccionar aquellas que puedan ofrecer tres posibilidades: función estética, resistencia al clima y perdurabilidad en el tiempo. De esta manera, se puede ornamentar el hogar adecuadamente, consiguiendo un resultado que te sorprenderá.
El cactus de Navidad, un recurso interesante para el salón
Existen dos variantes: los que tienen flor y los que no. Ambas tipologías producen un ambiente distendido, de frescor y templanza, pero aparentemente son diferentes. Evidentemente, aquellos que tengan mayor colorido van a resultar más novedosos y atractivos.
Un caso particular es el cactus de Navidad. Combina el color verde de las hojas con el blanco o rosáceo de las flores. No tiene un tamaño desmesurado, pero sí resulta llamativa su morfología. El propio color blanquecino o rosáceo que ofrece resulta bastante interesante para la estación del año.
No requiere cuidados periódicos, y pervive perfectamente en el ambiente cálido del hogar. De hecho, suele florecer en invierno y muestra unas hojas voluminosas. Necesita exposición a la luz natural, pero sin recibir directamente los rayos del sol para prevenir problemas.
A través de las plantas, le proporcionarás a tu hogar color, frescura y vida.
5 tipos de plantas de invierno para la terraza
En época de frío dejamos de utilizar los exteriores del hogar. Tanto la terraza como el jardín pueden quedar en desuso; sin embargo, esto no quiere decir que quede sin decoración. Podemos seguir manteniendo su estética, ya que forma parte de la casa igualmente.
- Los pensamientos o violas son un ejemplo de plantas con flores que pueden adornar la terraza. Ofrecen colores muy variados: morado, blanco y amarillo en distintas gamas. Resisten muy bien al frío y a las heladas, ofreciendo una apariencia primaveral.
- El rododendro es un tipo de planta que puede alcanzar gran altura, y ofrece variedad cromática: rojo, rosa y blanco. Se recomienda utilizar una maceta de gran tamaño. No obstante, es recomendable vigilar su crecimiento y podar siempre que sea necesario.
- La hortensia es de las más famosas dentro de la variedad de plantas invernales. De hecho, suele ser de las más comunes en hogares y jardines públicos. Ofrece una gama cromática realmente atractiva a la vista, desde rosas intensos a blancos puros.
- Una tipología poco común es la violeta de los Alpes. Posee unas hojas verdes realmente oscuras frente a los pétalos blanquecinos y rosáceos de las flores. No son habituales en países cálidos, y crecen mejor en lugares con una considerable altitud.
- En el caso de que se quiera un tipo de planta que pueda florecer durante todo el año, puede decorarse la terraza con las prímulas. Las hay con distintas tonalidades: azul, rojo, amarillo, blanco, etc. Incluso, pueden combinarse para generar policromía estética.
Plantas de invierno: el aroma embriagador de la lavanda
No cabe duda de que el aroma que desprende la lavanda es agradable y nos pone en contacto directo con el campo. La frescura que ofrece en el ambiente permite que nuestro hogar esté oxigenado y se genere una sensación de higiene y pureza.
Esta planta florece en invierno, y posee unas tonalidades púrpuras que embellecen el espacio donde se encuentre. Nuestra terraza podría decorarse perfectamente a través de jardineras con este vegetal.
De todos modos, es preferible que no comparta la misma tierra con otras plantas, ya que puede alcanzar un grado de protagonismo muy interesante en el lugar y ocultar las posibilidades de otras.
La lavanda no solo aporta color, sino también un buen aroma.
El brezo: un capricho de la naturaleza
Sin duda, el brezo es una de las plantas más singulares para el invierno. Puede desarrollarse tanto dentro como fuera de la casa. Además, el color y la forma resultan muy atractivos.
Requiere un cuidado y control básico y, a su vez, puede aguantar perfectamente las bajas temperaturas. Pero, además, contribuye con un toque de color rojizo, generando calidez en el ambiente.
- McCreary, Rosemari: Jardines de interior, Barcelona, Ceac, 2007.