Recomendaciones para mantener limpio el cuarto de baño
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
La limpieza debe estar presente en los hogares diariamente. Sin embargo, apenas tenemos tiempo para hacer limpiezas en profundidad; por eso, te mostramos algunas recomendaciones para mantener limpio el cuarto de baño.
Tanto este espacio como la cocina son los que más se ensucian, pues se usan a diario. En ambos sitios se generan numerosas bacterias que, si se dejan acumular, pueden ser nocivas para las personas.
Es muy importante mantener una atmósfera limpia y tratar de que haya una higiene; nuestro cuerpo nos lo agradecerá. Además, cualquier invitado podrá sentirse a gusto sabiendo que está todo limpio.
Veamos a continuación algunas recomendaciones que permiten mantener limpio el cuarto de baño, un lugar que si no se cuida semanalmente se convierte en un foco de suciedad.
¿Por qué el baño se ensucia tan rápido?
Este espacio es el más utilizado de la casa. Cada día se accede a él una media de 7 veces, algo que no resulta baladí, ya que en cada ocasión se utilizan los sanitarios y generamos suciedad.
Tanto el lavabo, la ducha como el váter se utilizan a diario; de hecho, sus funciones son las de proporcionarnos una higiene y limpieza corporal; por tanto, ¿por qué no devolverles la misma limpieza que nos proporcionan a nosotros?
No hay nada mejor que sentirnos aseados y poder disfrutar de un espacio libre de manchas, suciedad, malos olores, etc. En el fondo, eliminar residuos y mantener desinfectado el baño no es tan difícil, simplemente hay que comprometerse.
Concienciarse de la limpieza
Las prisas no son buenas y en el día a día no sacamos tiempo para la limpieza. Sería muy recomendable seguir los siguientes pasos diariamente:
- Dedica una hora al día a realizar tareas de la casa: una de las tareas debe ser limpieza del baño.
- Trata de no ensuciar de manera exagerada.
- Cualquier mancha o resto que se haya podido generar debe ser eliminado al instante, así se realizarán pequeños gestos de limpieza.
- Mantén en buen estado el baño: cuida los sanitarios especialmente.
- Perfuma y ten un ambiente fresco: los ambientadores ayudan enormemente a esto.
- Oblígate a limpiar aunque sea un día festivo: los hábitos de limpieza no deben pararse.
– La limpieza no tiene días de vacaciones; hay que mantener en orden la casa todos los días-
Hay que añadir una recomendación importante, especialmente para los que son padres: educar a los jóvenes en la limpieza les permitirá tener hábitos saludables en casa en el futuro.
Productos de limpieza
Cualquier producto no sirve para la limpieza. Por supuesto, existe una gama muy amplia, pero se debe discernir entre aquellos que van dirigidos a los distintos elementos que conforman el baño.
Por tanto, a la hora de realizar la limpieza del baño, hay que tener presente los siguientes procedimientos:
- Lavabo, ducha y váter: la lejía es el producto que, posiblemente, permita una eficiente limpieza de los sanitarios, eliminando bacterias y desinfectando completamente.
- Cristales y espejos: los limpiacristales ayudan a que quede un resultado brillante, quitando las manchas y polvo que generalmente se acumulan.
- Suelo: la lejía funciona también muy bien; sin embargo, hay productos especiales para suelo que desinfectan también, salvo que sea madera, para la cual habría que buscar aquel que no la dañe.
- Pared: limpiar simplemente para que no se produzca la acumulación de polvo y suciedad.
¿Con qué se debe limpiar?
El uso de guantes de plástico es esencial. Esto permitirá la protección de nuestra piel, la cual puede salir dañada si abusamos del contacto de algunos productos nocivos como la lejía o el amoniaco.
Por otro lado, es imprescindible limpiar con un estropajo o esponja que nos permita echar una simple gota y perdure durante todo el proceso; así se ahorra y se ayuda al medio ambiente.
Hay que realizar varias pasadas en cada sanitario, tratando de raspar en mayor medida donde haya manchas. Después se aclara con agua y se pasa un trapo para secarlo. Al final debe quedar todo perfecto y reluciente.
Por supuesto, en el váter se recomienda limpiarlo por dentro, incluso donde hay agua, ayudándose de la escobilla.
Una correcta limpieza es sinónimo de un ambiente sano e higiénico. Nuestra mente también lo agradecerá, ya que el poder llegar a casa y encontrarse todo limpio proporciona satisfacción.