Nuestros consejos para una decoración en blanco
Sinónimo de pureza, de calma, y sobre todo de iluminación, pero al mismo tiempo un poco ‘temido’ en los hogares, ya que puede ser a veces demasiado brillante o la suciedad notarse más. Pero que eso no te quite las ganas de tener una bonita decoración en blanco. En este artículo te contaremos cómo lograrla de la mejor manera.
Decoración en blanco: algunas claves
Si buscas un tono que logre más iluminación y simule más espacio en tu casa, entonces el blanco es el adecuado. Este color tiene muchas cualidades y beneficios, por ello es cada vez más usado en la decoración de interiores.
El blanco es recomendado sobre todo en ambientes de tamaño reducido, con techos bajos o que no cuenten con luz solar directa (o solo en algunos momentos del día o año). Lo mejor de todo es que contrasta a la perfección con cualquier otro color, incluso los más intensos.
Si eres amante de la pureza, de la luz y de los espacios amplios, la decoración en blanco es perfecta para ti. Puedes usar todo tipo de materiales, objetos y muebles en este tono, para darle un aspecto más reluciente y luminoso.
Aunque, en el caso de que no te animes a tanta osadía y a dejar todo ‘blanco y puro’ te recomendamos que juegues con otros tonos suaves como el crudo, el gris suave, el plateado o el marfil. De esta manera conseguirás un ambiente delicado, original y no tan monocromático.
Incluso, tienes la posibilidad de ‘desentonar’ un poco con algún objeto o accesorio que destaque: unos cojines azules, una lámpara marrón, una manta violeta, un cuadro dorado… ¡Todo puede servir!
En cuánto a sus ‘contras’ podríamos indicar que para algunas personas, las paredes o los muebles blancos no les permiten descansar bien por las noches -al menos hasta que se acostumbran- y que en el caso de tener niños o mascotas en la casa, es difícil mantener la limpieza. Una solución para esto último es usar pinturas lavables en las paredes y telas de fácil lavado.
Decoración en blanco: combinar con materiales
Es muy importante que definas primero el estilo que le quieres dar a tu casa o al ambiente donde decorarás con blanco. Luego, que sepas cuáles son los muebles, accesorios u objetos que incluirás, así como también de qué materiales están confeccionados. Algunas combinaciones son:
1. Blanco + madera
Para un estilo clásico puedes combinar un piso blanco a tu sala o bien una mesa de madera a una cocina con paredes blancas. Otra opción es el estilo nórdico, donde el mobiliario es de madera y el blanco está bastante presente.
2. Blanco + acero
El acero cromado de superficie brillante es el que mejor queda con este tipo de decoración en blanco. ¿Dónde se puede usar? En los grifos, en los marcos de las ventanas, en algún jarrón, etc.
3. Blanco + tela
Es la combinación que más alternativas ofrece, queda perfecto en la habitación y recibidor. Puedes añadir alfombras bien mullidas para andar descalzo, cortinas que permitan pasar la luz, sofás con mantas decorativas, mesas vestidas, etc.
4. Blanco + mármol
Aunque no lo creas, esta combinación es perfecta para diferentes ambientes, desde una sala hasta un vestíbulo o un recibidor. Te recomendamos que elijas un mármol con vetas o motas en tonos verdosos o grises. ¡Ideal para la cocina!
5. Blanco + piedra
Finalmente, en la decoración en blanco no pueden faltar las piedras si quieres conseguir un estilo más bien rústico. Una casa de montaña, aún viviendo en plena ciudad, puede ser lograda combinando también con maderas. La piedra puede estar, por ejemplo, en una bonita chimenea o estufa en medio de la sala.