El estilo bloomsbury en decoración de interiores
Escrito y verificado por la técnico en Decoración de Interiores 3D Sonia Budner
El estilo bloomsbury nace en Londres en la época victoriana y le debe su nombre al movimiento cultural creado por pintores, escritores y artistas conocido como el círculo bloomsbury. Este grupo de intelectuales estaba compuesto por Virginia Woolf, su hermana Vanessa Bell y sus más allegados.
Hablamos de un estilo inspirado en el barrio londinense donde se encuentra el Museo Británico. Un entorno que influyó notablemente en la literatura, la estética y en la forma de entender el mundo. Fue un movimiento artístico que desafió la moral victoriana en muchos sentidos. Un estilo lleno de color y arte que se destaca con sello propio.
Una estética colorista, llena de melancolía y de pasión que tenía como fin último el rechazo a las costumbres burguesas y la denuncia de una sociedad basada en la vulgaridad. Un intento muy osado de llevar la función estética más allá y contemplarla como portadora de un mensaje social bastante radical para la época vitoriana. Vamos a ver hoy en qué consiste el estilo bloomsbury en decoración de interiores y qué pautas y elementos decorativos utiliza.
El arte: la piedra angular del estilo bloomsbury
La base de este estilo son los lienzos colgados de la pared y libros por todas partes. En este sentido, las casas decoradas en estilo bloomsbury adoptan la forma de pequeños museos donde exponer arte de todo tipo.
Una estancia, como el salón o la sala de estar a la que se le quiera dar este aire, hay que verla como un gran lienzo en el que empezar a pintar, sin dejar, a ser posible, ningún espacio sin decorar. El estilo bloomsbury original es bastante recargado. No olvidemos que aún estábamos en época victoriana. El estilo bloomsbury más actual no ha perdido la esencia, aunque procura espacios menos cargados y más fluidos.
Los colores
El estilo bloomsbury utiliza tonos muy subidos de color. Son colores brillantes y estridentes, que deben usarse sin miedo. Los colores son el primer elemento para alcanzar la idea tremendamente teatral de este estilo.
De esta manera, encontraremos combinaciones maravillosas de azules intensos con rosas frambuesa mezclados por separado o conjuntamente en magníficos estampados florales. Rojos pimentón, naranjas persas, violetas, turquesas, verdes agua muy intensos, rosas de efecto lavado y amarillos.
Tejidos y revestimientos
Las telas en este estilo decorativo siguen las tendencias victorianas en texturas. Telas muy ricas, de calidad y elaboradas. Lo que las diferencia son los colores, y sobre todo, los estampados, que son otro de los grandes protagonistas del estilo bloomsbury. Estampados florales campestres de compleja trama y patchwork en colores muy vivos.
Tan importante se presentan los estampados en el bloomsbury que, de hecho, pueden combinarse diferentes tejidos florales en una misma butaca o sofá. Es un elemento que no debe descuidarse si queremos conseguir esta estética tan particular. De la misma manera, los papeles pintados cobran especial relevancia. Los mismos estampados que en las telas, pero con los que revestir las paredes.
Los muebles
Otro elemento particular son los muebles utilizados en este estilo. Son muebles victorianos repintados. Sin grandes restauraciones de la madera. Dan la impresión de haber sido pintados en multitud de ocasiones. Los muebles se pintan en cualquiera de los colores bloomsbury.
No se debe intentar combinar demasiado los colores, ya que lo ideal es utilizar muchos colores en la misma estancia sin limitarse a dos o tres, como ocurre en otros estilos de decoración de interiores.
Cobran importancia piezas que no pueden faltar, como los grandes biombos, las butacas de época y grandes y confortables sofás, cubiertos de multitud de cojines en cretonas estampadas, o dibujos en punto de cruz.
Los accesorios decorativos
Con estos elementos terminaremos de conseguir este look tan particular. Esenciales son la porcelana y la loza. Preferiblemente blanca con estampados florales artesanos, que no puede faltar. Grandes y mullidas alfombras en colores vivos y grandes lámparas de cristal.
Un accesorio decorativo a destacar en el estilo bloomsbury es el uso de los frentes de las chimeneas, bien de madera, bien de piedra, como lienzo para decorar con frescos. Las chimeneas y otros elementos arquitectónicos se pintan como si fueran verdaderos cuadros.
Un estilo que rompe todas las reglas del juego
Si lo que estás buscando es un look con personalidad propia, y fuera de todos los esquemas imaginables, este es un estilo que te encantará. Aporta una sensación de libertad y creatividad a cualquier habitación que no pasará desapercibida.
Recuerda que no deja de ser una variante algo anárquica del estilo victoriano, con lo que aquí sigue primando la regla del ‘más es más’. Con el estilo bloomsbury solo hay que seguir estas pequeñas pautas y perder el miedo. En definitiva, hablamos de un estilo consagrado a las artes y las letras como vía para romper los moldes establecidos.