Las Escuelas Pías de Lavapiés, recuperando las ruinas
La intervención de las Escuelas Pías y su entorno, en el barrio madrileño de Lavapiés, es una magnífica muestra de cómo podemos recuperar un edificio desde sus ruinas. Con una intervención que abarca distintas escalas, que van desde lo urbano hasta el diseño interior.
Además, podemos identificar el uso de diferentes sistemas constructivos, con lo cual encontramos diversos tipos de relación con la edificación preexistente. Con la integración de nuevos materiales se ha tenido un gran cuidado para que el conjunto tenga un lenguaje unitario.
El carácter de la intervención se ve plasmado en el principio de unidad que se intenta otorgar al conjunto, más allá de las soluciones particulares.
Escuelas Pías de Lavapiés: proyecto de Intervención
El proyecto de intervención de las Escuelas Pías se desarrolló entre 1996 y 2004, y actualmente es ocupado por la sede de la UNED Escuelas Pías en Lavapiés. Este es un proyecto singular y que difícilmente podamos clasificar en alguna categoría.
Esto debido a que abarca ámbitos de la restauración, la rehabilitación y de obra nueva. Aún con los diferentes componentes que lo integran, el proyecto tiene un lenguaje unitario, con unidades que dialogan entre sí, logrando que presente y pasado se conjuguen de manera excepcional.
El proyecto de recuperación de las antiguas Escuelas Pías es obra del arquitecto José Ignacio Linazasoro. Este propone el desarrollo de un espacio cultural en las ruinas de la iglesia de las antiguas Escuelas Pías de San Fernando y en el solar contiguo.
Esta intervención está planteada a modo de actuación urbana, con lo cual se reordena la Plaza de Agustín Lara, además de crear un aparcamiento soterrado. El edificio alberga un Aulario Universitario que se levanta en el solar vacío, y una biblioteca situada en las ruinas.
En el imaginario de este barrio, con un fuerte carácter, se ha afianzado la imagen de la ruina de la Iglesia. Resulta interesante el barrio de Lavapiés, debido a que en los últimos tiempos acoge a una población diversa, con diferentes orígenes étnicos.
El proyecto tenía como premisa la enorme carga de referencias que la historia ha ido reflejando en el proceso de desarrollo de este barrio.
Historia de las Escuelas Pías de Lavapiés
Fundado en el corazón del actual barrio madrileño de Lavapiés, este colegio religioso se erigió inicialmente durante el siglo XVIII. En primer momento se llamó Colegio de San Fernando, pero era conocido en el barrio como Colegio de Lavapiés.
El padre Juan García de la Concepción, capellán de la ermita del Pilar, lo fundó en 1729, en un solar de la calle Mesón de Paredes. Junto a esta ermita, encontramos algunas ruinas, las cuales son testimonio de la Guerra Civil durante gran parte del XX.
Las humildes instalaciones de las escuelas fueron adecuadas para acoger a la gran cantidad de niños que asistían para educarse. En 1735, el párroco de San Justo, propietario de la ermita, la cedió de manera permanente a la Orden de los Padres Escolapios.
Desde aquel momento, el colegio empezó a ser llamado Colegio de Nuestra Señora de la Portería, debido a una imagen de la Inmaculada Concepción de la Virgen María. En el año de 1737 se incorporan tres casas adyacentes al colegio, que unidas al espacio ya existente, se edificará un nuevo colegio más amplio.
Gracias a numerosos donativos, entre ellos los de los reyes Carlos III y Carlos IV, entre los años 1763 y 1791 se erigió la iglesia. Esta empresa estuvo a cargo del hermano Gabriel Escribano. El diseño era de una planta compuesta por una nave cuadrangular adyacente a una rotonda, coronada con una pomposa cúpula.
El azar hizo que cambiara de nombre a Colegio de San Fernando, el cual inicialmente se llamaría Nuestra Señora del Pilar, debido a que se inicialmente se encontraba junto a la antigua ermita de Nuestra Señora del Pilar.
En la rehabilitación de las Escuelas Pías de Lavapiés, la iglesia, un templo religioso, convierte su uso y pasa a ser una biblioteca, templo del conocimiento.
Las Escuelas Pías de Lavapiés durante la Guerra Civil española
Durante la Guerra Civil, el edificio fue incendiado el 19 de julio de 1936, justo un día después del inicio de la Guerra Civil española. Algunos historiadores sostienen que se saqueó el edificio de manera arbitraria, ya que las demás iglesias madrileñas no sufrieron daños.
Se cuenta que la Falange utilizaba la iglesia como polvorín, haciendo formación e instrucción militar en el patio. Por eso, estos se atrincheran en su interior la noche del 18 de julio, día del Golpe de Estado que da inicio a la guerra civil.
El día 19 de julio, se abre fuego desde una de las torres de la iglesia, disparando con una ametralladora. Producto de esto, se hiere a un vecino y otro es asesinado. Como respuesta a esto, los anarquistas de la CNT tomaron el templo, incendiándolo y arrasando con las imágenes.
Quedó en total estado de abandono, y a diferencia de otros edificios importantes, no se rehabilitó, manteniéndose tal cual quedó luego del incendio. El año 2002 el edificio es intervenido para construir una biblioteca y un Centro Asociado de la UNED.
El proceso de rehabilitación
El proyecto de rehabilitación de este edificio histórico se realizó para dar lugar a un aulario para la UNED. Este ocupa el solar vacío, resultado del derribo del Teatro Lavapiés. También se erigió una biblioteca en la antigua iglesia de las ruinas de las Escuelas Pías de San Fernando.
La biblioteca que ocupa lo que anteriormente era la iglesia y se relaciona visualmente con el aulario, además a través de una escalera que discurre paralela a sus muros. El interior está dominado por la ruina, que destaca sobre los materiales nuevos.
El proyecto intenta establecer un diálogo entre la arquitectura moderna y las ruinas del pasado. Resuelve de manera magistral la relación entre estos aspectos, además de resolver la integración de los volúmenes a diferentes escalas.
En este proyecto se pasa de la pequeña escala, apreciando la textura de los materiales, hasta una escala urbana, donde podemos ver la relación de la Biblioteca con el espacio público.
Sin lugar a dudas, la intervención en las Escuelas Pías de Lavapiés es un excelente ejemplo de la rehabilitación de edificios históricos para usos contemporáneos.