Te enseñamos a ahorrar en familia
Te proponemos una serie de ideas para ahorrar en familia. Anímate y ahorra al mismo tiempo que inculcas a tus hijos la importancia del ahorro y sobre todo del no derroche. Al mismo tiempo que mejoras tu economía con pequeños gestos estarás siendo un buen ejemplo como padre o madre. Además está comprobado que los hábitos que los niños adquieren y asientan durante sus primeros años de vida los mantendrán para siempre porque los habrán adquirido como algo natural.
Como ves, el ahorro en familia presenta muchas ventajas además de la mejora de la economía. Decide con el resto de tu familia las técnicas que vais a aplicar, como lo vais a hacer y que tarea va a tener cada uno. El trabajo en familia y el respeto al medio ambiente son otras de las ventajas de esta forma de ahorro.
Si quieres conocer como puedes ahorrar en familia sigue leyendo y aplica en tu día a día las técnicas que te proponemos.
Hucha transparente
Si tienes hijos lo mejor que puedes hacer para motivarlos es hacerles ver el ahorro como algo divertido. De este modo lo verán como un juego y se motivarán para ahorrar. Una forma de ahorro divertido en familia es colocar en el salón una hucha transparente. Así podremos ver como está de llena y motivarnos para que alcance su máximo nivel.
Si el dinero va destinado a algo concreto será más fácil mantener la motivación.
Si el dinero va destinado a algo concreto seguro que la motivación es mayor y no “duele” tanto introducir el dinero. Una buena idea es poner un cartel que indique “vacaciones”, “fin de semana en la playa” u otra idea similar.
Las técnicas para que la hucha se llene pueden ser varias:
- Acordar que un día a la semana, cuando todos los miembros de la familia estén juntos introducir una cantidad a la hucha. Por ejemplo, todos los domingos antes de la comida familiar cada miembro introducirá 2€. Parece poco pero si sois cuatro miembros y los hacéis de enero a julio habréis conseguido reunir casi 400€. Serán perfectos para ir de vacaciones.
- Castigar los malos comportamientos. Esta técnica es recomendable cuando hay adolescentes en casa. Cada vez que no cumpla una de sus tareas o habla de forma inapropiada deberá introducir una cantidad a la hucha. Esta cantidad deberá ser acorde con la paga que le asignen sus padres. Es decir, si le das a tu hijo 20 euros semanales no puedes pretender que incluya 10€ en la hucha cada vez que hace algo mal. También habrá castigos para los padres para que toda la familia aporte. Penalizar las palabras malsonantes o el no cumplimiento de las tareas son algún ejemplo.
Hacer la lista de la compra en familia
Hacer la lista de la compra es otra de las formas de ahorrar en familia. Está comprobado que cuando vamos al supermercado sin lista acabamos comprando cosas que no necesitamos. Además no suelen ser útiles, ni sanas por lo que lo único que se consigue es malgastar dinero.
Te proponemos que aproveches un momento en el que todos los miembros de la familia estén reunidos para sacar papel y lápiz y entre todos elaborar la lista de la compra. Solo se incluirá aquello que sea verdaderamente necesario y todos los miembros deberán aceptar lo que alguno de ellos proponga.
Una vez en el supermercado habrá que ajustarse a la lista y no comprar nada que no aparezca en ella. Este método además de conseguir ahorrar es una buena forma de fomentar la comunicación y el diálogo en la familia.
Uso eficiente de la energía
En los últimos años el precio de la energía se ha disparado hasta alcanzar cifras desorbitadas. Todos hemos podido comprobar como consumiendo lo mismo nuestra factura crecía mes tras mes. De todos modos también hay que reconocer que utilizamos más energía de la que en realidad necesitamos y eso además de inflar nuestra factura perjudica al medio ambiente.
Algunas de las medidas que proponemos para ahorrar energía en familia son las siguientes:
- Prestar especial atención a las luces encendidas. Salir de la habitación y no apagar la luz o encenderla cuando entra suficiente luz por la ventana es algo que todos hemos hecho.
- Poner la lavadora o el lavavajillas cuando estén totalmente llenos. Para esto hace falta coordinación familiar. Hay que dejar claro cuando se va a poner la lavadora para que todos los miembros introduzcan su ropa y luego no haya que poner una lavadora extra para dos pares de pantalones.
- Marcar un tiempo límite para la ducha. En ocasiones tardamos en ducharnos una cantidad de tiempo excesiva. ¿Quién no le ha tenido que gritar a su hijo adolescente para que terminase de ducharse? Decide en familia cuál es el tiempo máximo de ducha. Así ahorrarás agua y sobretodo lo que cuesta calentarla.