¿Te has mudado de ciudad? Consejos para adaptarte a tu nuevo destino

Los cambios pueden suponer un giro en nuestras vidas. Por eso, es conveniente saber qué pautas pueden ayudarnos para facilitar la adaptación al nuevo espacio.
¿Te has mudado de ciudad? Consejos para adaptarte a tu nuevo destino
Francisco Jiménez

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez.

Última actualización: 05 febrero, 2020

Los cambios pueden resultar algo estresantes, sobre todo si nos suponen un giro drástico en la vida. ¿Te has mudado de ciudad? Consejos para adaptarte a tu nuevo destino y no cometer errores desde el primer momento es lo que se necesita para solventar la situación.

Comenzar a residir en un lugar nuevo puede generarnos incertidumbre. En muchas ocasiones, supone un quebradero de cabeza. Además, se comienza otro estilo de vida en un lugar distinto al habitual; esto conlleva adaptarse a otra vivienda, lo que se convierte en un reto personal y familiar.

Desde un primer momento, hay que tratar de acomodarse al destino; sin embargo, a veces nos resulta más complicado de lo habitual. Todos tenemos en nuestro interior la nostalgia que nos recuerda el pasado, los lugares donde hemos residido y los buenos momentos vividos.

Te has mudado de ciudad: la nueva vivienda

Hacer mudanza.

Cuando llevamos muchos años en una casa, nos surge un sentimiento de arraigo y conexión con ella. Por eso, si tenemos que cambiar ciudad y comenzar a residir en una nueva vivienda, es recomendable que esta sea parecida a la anterior. 

Hay personas que prefieren dar un giro de 180 grados y buscar una alternativa distinta a lo que tenían anteriormente; en cambio, otras prefieren mantener un estilo parecido. De esta manera, no se produce un contraste tan drástico, sino más bien sería como una continuidad.

Si estamos acostumbrados a vivir en pisos pequeños o en casas de un tamaño determinado, puede que nos ayude a sentirnos mejor si la nueva casa mantiene los mismos parámetros. Siempre debemos buscar la máxima comodidad y sentirnos agusto con nosotros mismos.

– Las viviendas de toda la vida definen también nuestra personalidad.-

Conocer el entorno de la vivienda cuando te has mudado de ciudad

El arte urbano del Barrio del Oeste, en Salamanca.
© Salamanca TV al día.

Además de conocer tu espacio privado, también conviene saber cómo es el entorno público de la ciudad. Para ello, es importante seguir las siguientes pautas:

  • Comprobar cómo es el vecindario en el que se comienza a residir. Es conveniente conocer, desde un principio, tanto el portal como el propio edificio al completo.
  • Si estamos habitando en una casa que anteriormente tuvo inquilinos, nos interesa saber cuál es el motivo por el que se marcharon del lugar. Es una manera de cercionarse de que todo esté en orden y no existan problemas ocultos.
  • Si te mudaste de ciudad, no está de más poder presentarse ante los nuevos vecinos y saber quién es el presidente de la comunidad, en el caso de sea un edificio. Solo así podremos tener ayuda en el caso de que tengamos algún imprevisto o debamos hacer reparaciones.
  • La propia calle y el barrio deben ser el siguiente punto. Una vez que conocemos nuestro habitáculo, es preciso que sepamos qué servicios nos ofrece la calle y cómo es el barrio en el que comenzamos una nueva vida. En el fondo, es una manera de poder integrarse poco a poco.
  • Resulta fundamental localizar dónde están los supermercados y cierto tipo de tiendas. Para ello, debemos salir más allá, incluso, de nuestro barrio y tratar de conocer otras zonas de la ciudad.

La importancia de amueblar y decorar lo más pronto posible

Salas modernas con colores vivos y turquesa

Cuando te has mudado de ciudad, no hay que demorarse mucho tiempo en acondicionar la vivienda. Es necesario que se amueblen las habitaciones lo más pronto posible, principalmente para que se gane mayor comodidad. Si se tienen dudas, lo mejor es contratar a un interiorista.

Por otro lado, la decoración de las paredes, las estanterías y las muebles debe ser crucial. Reutilizar los recursos de la anterior residencia puede ayudar; no obstante, aplicar nuevos elementos decorativos nos ayudaría a ver esta nueva casa como una muestra de renovación.

Favorecer la convivencia entre la familia

Pintar la casa en familia. Te has mudado de ciudad

Posiblemente, algún miembro de la familia no estuviese de acuerdo en mudarse al nuevo destino. Esto les suele ocurrir a los más pequeños de la casa, ya que están dejando a un lado sus amistades y su círculo de confort por otro destino en el que comienzan una nueva vida.

Hay que tratar de conciliar y hacerles entender que la nueva casa está asociada a un futuro próspero, siendo una oportunidad para mejorar las condiciones del pasado.

Bien es cierto que el tiempo todo lo cura; por eso, si existe algún tipo de tensión en la familia, es cuestión de que pasen las semanas y la personalidad de cada uno se vaya acostumbrando a la casa y la ciudad.



  • O'Hanlon, Bill: Pequeños grandes cambios: Diez maneras sencillas de transformar tu vida, Paidós, 2003.