Tecnología y ecoeficiencia en los electrodomésticos
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
Hoy en día, medimos el rendimiento de las maquinarias a través de los resultados. Socialmente, el nivel de exigencia está creciendo y cada vez se demanda más la calidad a buen precio. Por eso, conviene que conozcamos los avances en tecnología y ecoeficiencia en los electrodomésticos.
El progreso está presente en nuestras vidas. Las grandes multinacionales tratan de buscar alternativas que nos faciliten las tareas del hogar, especialmente las relacionadas con la limpieza, tratamiento y conservación de alimentos.
Todo esto se trata de visualizar desde un punto de vista ecológico; es decir, se pretende alcanzar un objetivo común que garantice el bienestar sin que se derroche el agua ni la energía. Por tanto, ¿es posible aunar en un aparato todas estas cualidades?
Tecnología y ecoeficiencia demostrable
La etiqueta de bajo consumo suele asociarse a los electrodomésticos que, en realidad, cumplen unos requisitos oficiales. Esto quiere decir que obtendremos eficiencia sin la necesidad de gastar demasiada energía. Este hecho está asociado al ahorro económico, un factor que nos interesa a todos.
La Unión Europea creó una etiqueta que, generalmente, suelen llevar aquellos modelos que se vinculan al grupo de los ecoeficientes. De esta manera, se muestra qué productos son sostenibles y cuáles han sido probados por especialistas que avalan esta categoría.
Así, conocemos los vatios de potencia, los decibelios de ruido, el peso que soporta y otras características que deben quedar al alcance del consumidor. Además, incorporan un código QR que nos ofrece información más amplia. No cabe duda de que es todo un avance.
Es imprescindible que sepamos con qué aparatos estamos trabajando.
Objetivo prioritario: cuidar el planeta
Últimamente, se comprueba una mayor conciencia social en cuanto al cuidado del medio ambiente. Las instituciones gubernamentales tratan de poner remedio a la contaminación desmedida pero, para lograrlo, hay que intervenir, incluso, en los propios hogares.
Desde el punto de vista de los electrodomésticos, vamos a conocer algunas de las actuaciones que se están realizando a día de hoy:
- Las compañías están volcadas en la producción sostenible y, a su vez, ponen de su parte para que, una vez finalizada la vida de aparato, sea factible el reciclaje. Los puntos limpios en las ciudades son fundamentales para la gestión de los residuos.
- Interesa que se establezcan clasificaciones en el tipo de consumo energético y, además, las prestaciones que ofrecen. La finalidad es que se cree una conciencia social para que llevemos a nuestras casas los productos más eficientes.
- Para cuidar el planeta, debemos comenzar, en primer lugar, por ahorrar agua y no malgastar la luz. En este sentido, notaremos una clara reducción en el coste de las facturas y haremos que las viviendas sean más ecológicas.
- Los controles de calidad son muy comunes en los países. Los ministerios de medio ambiente tratan de supervisar de forma minuciosa cada electrodoméstico que sale al mercado. Cuando existe una preocupación desde los gobiernos, es cuando se pueden verificar los resultados.
Las novedades del mercado: neveras y lavadoras
Al hablar de tecnología y ecoeficiencia en los electrodomésticos, es preciso que hagamos un repaso de algunos que constituyen este grupo y qué debemos tener presente.
Las neveras que tienen este calificativo ofrecen una conservación plena y duradera de los alimentos. Para diferenciarlos del resto, deben tener la etiqueta A +++. De este modo, la capacidad de enfriamiento es mucho más rápida y se regula la humedad de manera más efectiva.
En cuanto a las lavadoras, es obvio que para garantizar un desarrollo sostenible es preciso emplear menos agua. Esto no influye en la cantidad de ropa que introduzcamos. La capacidad de carga es la misma que otras, solo que ofrecen un rendimiento eficiente y no requieren un esfuerzo energético tan elevado.
¿Debemos cambiar los electrodomésticos?
Si echamos un vistazo a los aparatos que tenemos en casa, nos daremos cuenta de que más de uno está bastante anticuado. No tenemos la obligación moral de cambiarlos todos repentinamente, pero si vamos a deshacernos de uno, conviene que el próximo que compremos sea el más adecuado.
La importancia de adquirir un electrodoméstico de calidad nos ofrece todo tipo de garantías. Por tanto, hay que fijarse que sean ecoeficientes, con el fin de tener un planeta mejor y, por supuesto, que nosotros ahorremos dinero mensualmente.
AA. VV.: Electrotecnia, Akal, 2001.