Detalles decorativos para personalizar tus estancias
Los detalles decorativos son ideales para darle un toque personal a cada rincón de tu vivienda. Todos los objetos que coleccionas a lo largo de la vida pueden ocupar espacios diferenciados en el hogar.
Las últimas pinceladas en la decoración de una habitación reafirman su atmósfera y contribuyen a lograr un espacio vivo, útil y relajante al mismo tiempo. ¡Compruébalo tú mismo!
Detalles decorativos: un punto de equilibrio
Existen dos extremos claros e infinidad de puntos intermedios a la hora de exponer objetos en casa: la sencillez y la acumulación. ¿Tú por cuál te decantas?
En el primer caso, se tiende a exponer unos pocos objetos de valor o de belleza excepcional, mientras que, en el segundo, se corre el riesgo de exhibir todo lo que se ha acumulado a lo largo de los años.
Para evitar esto, hay que hacer una selección cuidada para exhibir los objetos que tengan algo en común, ya sea la forma, el tamaño, la textura o su origen.
Ten en cuenta que los objetos decorativos lucirán mejor en estanterías, repisas de chimenea, mesas esquineras si se presentan con un orden y una intención, más allá de llenar el espacio.
Detalles decorativos que darán personalidad a tu hogar
Esculturas
Una escultura siempre aporta distinción a una casa, independientemente de su tamaño y de su estilo, del material con el que está hecha, o si se trata de una talla o de una pieza abstracta.
Su ubicación ideal vendrá determinada, por un lado, por su volumen y, por otro, por su valor real o afectivo. Las esculturas de gran tamaño resaltan más si las colocas solas, por ejemplo, en la entrada de la casa, junto a una pared amplia o en una esquina.
La única regla en estos casos es la armonía visual que la obra de arte debe mantener con el resto de los objetos dispuestos a su alrededor. Será muy importante, también, prestar atención a la iluminación pues aportará un protagonismo necesario a la pieza.
En ocasiones, es recomendable acudir a elementos que realcen la obra de arte. Por ejemplo, si esta no es de gran tamaño, se verá mejor expuesta sobre un pedestal o una peana.
Recomendamos colocar las esculturas sobre una mesa o debajo de esta si es de cristal; en vitrinas o colgadas en la pared, si fuera posible.
Figuras
Las piezas de menor tamaño, como las tallas de madera, estatuillas o figuras de cualquier material, requieren una atención especial para lograr su perfecta colocación.
A diferencia de las esculturas, especialmente por su tamaño, necesitarán reposar sobre algo, bien sea una mesa o una vitrina, salvo casos excepcionales en los que merecen un tratamiento similar al de las obras de arte.
Eso sí, procura evitar mezclar muchos materiales, tamaños y colores en un mismo espacio, menos aún si es reducido. De esta manera, siempre quedará mejor combinar dos figuras de hierro solas que acompañarlas de una de porcelana.
Velas
Las velas poseen una particular característica: gustan a todo el mundo y contribuyen a crear una cierta atmósfera nostálgica y, a la vez, muy cálida. Esas cualidades son las que se pueden explotar en cualquier rincón de la casa.
En el mercado, existe una amplia variedad en cuanto a formas, colores y tamaños; con un poco de imaginación podrás hacer una combinación que, por ejemplo, dé carácter a una mesa.
Una opción que da buen resultado es apostar por un grupo de velas del mismo color pero en distintos tonos. Para ambientes más atrevidos, puedes elegir un color que busque el contraste con el resto.
También, recomendamos agrupar varias velas sobre un alféizar para crear un punto de luz en la noche. Si las reúnes en hilera y por orden de tamaño, quedarán muy bien.
¿Y qué tal si las colocas en botes de cristal o, simplemente, en unos vasos bajos? Si optases por envases de mayor tamaño y con unas cuantas piezas de cristal de colores como base, serían un adorno muy adecuado para alegrar una habitación.
Así que no te resistas a colocar bonitos detalles decorativos, eso sí, piensa dónde y cómo lo vas a hacer para que aporten a tu hogar ese toque de distinción que deseas.