Juguetes sin utilizar: ¿qué hacer con ellos?
Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez
Bien es cierto que, cuando nuestros hijos se hacen mayores, los juguetes, la ropa y otros complementos quedan ya en desuso. Llega un momento en que se almacenan y estorban; por eso, pregúntate si hay juguetes sin utilizar y qué hacer con ellos.
Si te surge esta duda, hay varias soluciones que pueden venirte bien para no acumular y que no entorpezcan. A lo mejor algún día se pueden reutilizar, pero nunca se sabe cuándo ni cómo. Por tanto, es mejor pensar en el presente y buscar soluciones.
El principal objetivo es gestionar el espacio y todos los recursos para que no acaben dispuestos en cualquier parte de la casa. Tampoco es recomendable guardar por guardar; lo ideal sería hacer una autoevaluación y saber si algún día pueden volver a utilizarse.
El problema de comprar en exceso
Algo común que está viviendo la sociedad actual es comprar cosas sin necesidad; es decir, muchas veces se adquieren todo tipo de productos para la familia sin tener necesidad de ello. Es lo que hoy en día se denomina consumismo.
Convendría hacer balance de la situación y tratar de entender cuáles son los errores y en qué hay que mejorar. A partir de ahí, el hacer demasiadas compras no solamente perjudicará a nuestro bolsillo, también a la decoración del hogar.
Eso ocurre con los juguetes que se compran a los niños. Tanto en Navidad, en su cumpleaños y durante el resto del año, se les da todo tipo de caprichos y lo único que consigues es acostumbrarles a tener y a acumular sin disfrutar de las cosas.
– Hay que comprar con cabeza y disfrutar con lo poco que se tiene.-
Reutiliza juguetes para la decoración
Disponer juguetes como recurso decorativo puede ser práctico e interesante. Eso sí, siempre y cuando tengan una función estética acorde con el lugar.
- Evidentemente, una habitación de niños puede ser un lugar ideal. Los juguetes pueden cumplir función decorativa y generar un ambiente infantil. Aquellos que ya no se utilicen, pueden colocarse en estanterías a modo expositivo.
- En el resto de la casa, ¿se puede decorar con juguetes? Sí, pero hay que saber seleccionar. Por ejemplo, los coches pequeños pueden colocarse en el salón con el propósito de mostrar la pasión que siente el inquilino por los automóviles.
- A un peluche se le puede cambiar la finalidad, dejando de ser un juguete para convertirse en una pieza de muestra, ya sea en un salón, dormitorio o habitación de niños. Incluso, se le puede cambiar su apariencia, ponerle ropa o cualquier otro recurso.
- Las casas de muñecas siempre han estado presentes en la decoración; de hecho, no son tanto un juguete, si no una pieza artística en miniatura que estéticamente resulta agradable. En el fondo, en cualquier parte de la casa quedan bien.
Guardarlos en armarios sin acumular
Otra solución, para que no entorpezcan en las habitaciones, es guardar los juguetes sin utilizar en armarios. De esta manera, se conseguirán los siguientes propósitos:
- No acumular ni generar suciedad, facilitando la limpieza de los espacios siempre que sea necesario.
- Se ocultan, así, todos los juguetes que ya no son útiles, quedando resguardados en un sitio concreto para que no se deterioren.
- Mantenerlos ordenados en un punto concreto. Si se necesita acudir a ellos, se puede hacer directamente sabiendo dónde están.
- Es preferible deshacerse de aquellos que puedan estar rotos o muy desgastados, ya que si se guardan con el resto, lo único que se conseguirá es acumularlos.
- No es necesario comprar un armario solo para ellos. Siempre hay algunos huecos o cajones que son de uso exclusivo.
Deshacerse de aquellos juguetes sin utilizar
Si algunos juguetes ya no se utilizan, pero aún están servibles, no es preciso almacenarlos en casa si en un futuro tampoco tendrán una utilidad. Por tanto, hay que buscar otra solución.
Existen organizaciones solidarias que se encargan de reunir juguetes para niños en situación de pobreza. Lo que a ti te sobra, a otros les falta. Esta es una buena medida para poder oxigenar la casa, no acumular y hacer una buena labor social.
Lo importante en la vida es vivir con los justo y necesario. Por eso, es imprescindible educar a los niños en la idea de cuidar todo, respetarlo y compartirlo con quienes lo necesitan.