Estilosos dormitorios en color gris
Escrito y verificado por la técnico en Decoración de Interiores 3D Sonia Budner
El gris es un color que nos encanta. Contrariamente a lo que muchas personas creen, el gris no siempre es un color frío que no transmite nada. Muy al contrario, una sabia utilización del gris en decoración de interiores puede dar una inestimable sensación de calidez y protección. Hoy nos ocupamos de cómo crear estilosos dormitorios en color gris.
Para conseguir una perfecta sintonía en los tonos lo primero es preguntarse cómo de gris queremos el dormitorio, y cuántos tonos de gris estamos dispuestos a permitirnos. Estas son las cuestiones clave para no terminar dormitando en una habitación gris plana.
Los contrastes de diferentes grises entre sí, o con otros tonos neutros e, incluso, con algún acento de color más vibrante son el éxito de la decoración de dormitorios en este tono.
Estas combinaciones, bien llevadas a cabo, ofrecen resultados dignos de la fotografía de cualquier revista especializada. Requiere algunas técnicas y reglas básicas.
La psicología del gris en el diseño de interiores
El gris es el color neutro por excelencia. Pero, en decoración, el gris es el color del camuflaje. Una elección que aporta una increíble sensación de seguridad y protección del mundo exterior.
Por eso es nuestro favorito en la decoración de dormitorios. En las zonas de descanso es donde más necesitamos alejarnos y desconectar del resto del mundo.
El gris es, además, un color equilibrado, sin fuertes emociones. Es un color sofisticado que carece de la negatividad del negro, y cuando son grises claros aportan todas las cualidades del blanco.
Los tonos de gris más claro son de naturaleza femenina, y los oscuros son de naturaleza masculina. De ahí la importancia de saber equilibrar correctamente el color gris.
Los muebles
Si queremos crear un dormitorio en color gris, tenemos que incorporar los muebles a la temática. No nos basta con añadir el color a los textiles. Los muebles en acabados grises o taupes son imprescindibles para conseguir esta estética.
Los muebles en maderas pintadas en cualquier tono de gris nos sirven. Incluso, podemos decidirnos por alguna pieza de mobiliario con superficies de espejo.
El espejo nos proporciona el tono con el lujo añadido del reflejo, que a su vez reflejará los otros tonos grises de la habitación que les harán adquirir el tono por ellos mismos.
Los textiles
Aquí es donde vamos a jugar con las texturas y los diferentes tonos de gris para crear sensación de profundidad y calidez. Las camas tapizadas en gris o un gran cabecero son el comienzo. Pero necesitamos más piezas tapizadas para conseguir un buen acabado en los dormitorios en color gris.
Butacas, alfombras, algún sillón que pueda incorporarse al dormitorio o una silla de tocador. Nos alejaremos de tapizarlo todo con la misma tela o el mismo tono de gris. Aquí es donde necesitamos jugar con los contrastes. Grises en tonos oscuros se deben combinar con los tonos más suaves posibles. Cuanto mayor contraste, mejor efecto.
El un dormitorio en color gris es indispensable que la ropa de cama esté en concordancia con el resto de la habitación. La elegiremos gris, sí, pero con algunos trucos. Si las paredes se han pintado en tonos oscuros, la ropa de cama debe colocarse en gris claro y viceversa.
De lo contrario, solo conseguiremos una gran masa gris en el dormitorio. Las piezas que se decidan colocar el blanco pueden ir rematadas con ribetes en gris. Los edredones grises, con la manta de pie de cama contrastando en tono.
Esquemas en un dormitorio de color gris
Los esquemas de color en este tono son fáciles porque el color gris combina con casi todos los colores. Cuando diseñamos dormitorios en color gris, tenemos la ventaja de contar con numerosas opciones de contraste. El truco: varios tonos de gris y un solo tono de contraste.
Nuestra favorita, sin duda, es la combinación del gris y el blanco. Dos tonos neutros que, cuando el color gris elegido es un tono pálido, confiere a la estancia una sensación de tranquilidad y sofisticación raramente superable. Si queremos añadir un toque extra de calidez, sustituimos el blanco por los tonos crema. Insuperable.
Otra combinación siempre ganadora es el gris con tonos de blush o rosa cuarzo. El truco es que hay que añadir el blush en toques muy pequeños. Para el mismo esquema de color nos sirven los tonos lavanda claros. El resultado es siempre espectacular.
Las combinaciones del gris con naranja aportan una sensación muy pop a cualquier decoración. No es del gusto de todo el mundo, pero funcionan también muy bien juntos. Para que el toque de contraste quede aún más resaltado, podemos utilizar tejidos de alta calidad, como los terciopelos para los colores del acento.
Para los gustos más exquisitos de dormitorios en color gris
El último esquema de color que presentamos para dormitorios en color gris es la combinación de gris con plata. Y aquí todo vale, solo hace falta imaginación. Podemos jugar con las superficies de los muebles, el cromado de las lámparas, pero también el color plata aplicado a los tejidos. Conseguirás un dormitorio de lujo.