El paisaje de La Villette de Bernard Tschumi
Escrito y verificado por arquitecto Renato Alonso Ampuero Rodríguez
El parque de la Villette, proyectado por Bernard Tschumi, es un gran espacio recreativo con un gran sentido del paisaje urbano. Este también cuenta con edificios de equipamiento y galerías para recorrerlos. Es un proyecto de renovación urbana de una amplia zona que se encontraba abandonada.
Es el parque más extenso de París, y uno de los mejores ejemplos de arquitectura deconstructivista. Proyectada en 1982, La Villette ha sido amada y odiada desde ese momento. Pero, sin lugar a dudas, es un referente de la arquitectura mundial.
Este proyecto pone énfasis en la apropiación del espacio público, al igual que el tratamiento paisajístico. Este parque ocupa unas 55 hectáreas y se desarrolla en el lugar del viejo matadero y mercado de ganado de la ciudad.
Antecedentes del proyecto
El plan de revitalización de París contempla la construcción de este gran parque, impulsado por el entonces presidente francés François Mitterrand. Se convoca un concurso para el diseño de un gran parque en el lugar del antiguo matadero.
Este concurso tuvo una gran acogida a nivel internacional, por lo que participan arquitectos importantes, como Rem Koolhaas o Peter Eisenman. Pero ninguno de estos dos sería el vencedor, el primer puesto recayó en el arquitecto suizo Bernard Tschumi.
La propuesta presentada por Tschumi rompe con los esquemas de un parque urbano tradicional. Con este proyecto se trata de cuestionar el modelo del espacio público del París del siglo XIX.
El proyecto apuesta por la concepción de un parque cultural, convirtiéndose en un espacio de intercambio social y cultural entre sus visitantes. Los volúmenes arquitectónicos dominan el paisaje de este parque, recreando el paisaje urbano de la ciudad dentro del mismo.
La arquitectura no es tanto el conocimiento de la forma, sino una forma de conocimiento.
Bernard Tschumi.
Composición del parque
El proyecto del parque se ideó basándose en tres componentes o “capas” fundamentales. Estos componentes son independientes, pero se superponen para interactuar entre sí.
Los tres componentes son: superficies, líneas y una cuadrícula de puntos ocupados por edificios, a los cuales Tschumi llama folies. Las folies son elementos arquitectónicos que, como su nombre indica, son una especie de “locuras”.
La Villette de Tschumi es un parque que apuesta por la ruptura del concepto histórico de los jardines urbanos parisinos. Para este arquitecto, el parque debe ser un lugar de experiencias, en el cual el visitante es el protagonista del paisaje.
Este visitante tiene el poder de intervenir y participar a su manera en el espacio público. El usuario genera su propia lectura del lugar a través de la libertad de recorrerlo que le es conferida.
La cuadrícula de puntos está definida por una grilla de 120 metros, otorgándole la misma jerarquía a todos sus componentes. En la intersección de la trama se construirán los elementos arquitectónicos llamados folies.
Las líneas se representan a través de las galerías, siendo elementos que ordenan. Estas líneas no coinciden con la trama ortogonal de la cuadrícula, pero vinculan una diversidad de elementos diferentes. Las líneas de vinculación sirven para que el visitante se apropie del parque, definiendo la forma de moverse dentro de este.
Las superficies se encuentran materializadas en los jardines, los cuales se encuentran entre los ejes de la trama y las galerías lineales. Cada jardín está pensado individualmente, con un diseño propio, donde se desarrollan múltiples actividades.
Las superficies desarrollan el concepto de paseo cinemático aplicado por Bernard Tschumi. Este concepto, representado por la secuencia de estos espacios, se corresponde con los cuadros de imágenes de una película.
El paisaje de La Villette de Bernard Tschumi
La superposición de los tres componentes genera un sinfín de escenarios aleatorios que se encuentran siempre en conflicto. Estos escenarios, que se encuentran en conflicto de manera aleatoria, enriquecen el espacio.
Un concepto clave que define el paisaje urbano de este parque es el paseo cinemático, el cual serpentea entre la gran grilla y la geometría pura de las folies. Este paseo es una metáfora cinematográfica, en el cual destacan los cubos rojos de las folies y la secuencia generada por los jardines.
Los jardines tienen una extensión aproximada de 600 m² cada uno, y en estos se desarrollan actividades como juegos electrónicos, juegos de niños y áreas de picnic.
El paisaje de La Villette es el resultado de una nueva visión del proceso creativo, donde naturaleza y ciudad se relacionan desde la arquitectura y el arte. El proyecto apuesta por un lugar que intenta recrear el espacio urbano moderno, plagado de significados múltiples y escenarios aleatorios.