Cómo cultivar fresas en casa
Escrito y verificado por la historiadora del arte Sofía Sangrador del Río
Conoce los pasos fundamentales para cultivar fresas en casa. Como verás, es algo bastante fácil y rápido, así que no encontrarás demasiados inconvenientes o problemas, quizás solo que debes prestar atención al sistema de riego.
Cada vez hay más personas que deciden cultivar alimentos en casa, en búsqueda de una dieta más sana, además de económica. Además, esto es ideal si te preocupas por la preservación del medio ambiente. Por todo esto más y más gente apuesta por crear verdaderos huertos urbanos o mini jardines en su propia casa. ¡Atrévete tú también!
A continuación te dejamos las principales ideas sobre el cultivo de las fresas. Esperamos que te sean de ayuda.
¿Plántulas o semillas?
Ante todo, queremos decirte que las fresas se plantan con bastante facilidad, al igual que otros alimentos como champiñones, tomates cherry, por lo que no tendrás ningún problema. A la hora de plantearte cómo hacerlo, encontrarás dos opciones: hacerlo mediante semillas o plántulas.
Si eres principiante en el mundo de la jardinería, lo mejor sería que te decantaras por las plántulas: es un proceso más rápido y fácil. Tras comprarlas, solo debes trasplantarlas en las macetas que hayas escogido.
Aunque puedes encontrar a la venta macetas específicas para fresas, en realidad puedes usar una maceta normal. Sin duda, esto no será un impedimento para cultivar fresas en casa.
Además, es muy fácil comprar estas plántulas, están en cualquier vivero o tienda especializada en jardinería. Son muy baratas, puedes encontrarlas incluso por menos de 1 euro.
En cambio, si decides sembrar a partir de semillas, probablemente sea un proceso un poco mas costoso, pero es una opción viable.
Siembra
En primer lugar, debes tener en cuenta que el período ideal para plantar las fresas es a finales del invierno o a principios de la primavera. Es cuando los días empiezan a crecer y aumentan poco a poco las temperaturas.
Además, es necesario que las plantes en alguna zona en la que de mucho el sol, es imprescindible. Es la mejor manera de que crezcan plantas fuertes, sin plagas o enfermedades.
Aún así, la zona que escojas no debe estar muy expuesta, tiene que estar un poco protegida. Puedes plantarlas perfectamente en una maceta y colocarla después en la repisa de una ventana o en el suelo del balcón o de tu terraza. Eso sí, si en uno de los lados hay una pared, tienes que tener cuidado y girar la maceta de vez en cuando, para que todos los lados reciban la misma luz.
También puedes colocarlas si tienes un mini jardín en tu terraza o balcón junto con otras plantas.
En cuanto a la tierra que escojas para ello, debe estar algo ácida. Piensa que siempre puedes añadir algo de compost o abono. Es algo que puedes comprar en cualquier hipermercado o tienda de jardinería sin ningún problema, incluso en tiendas online. De esta manera te asegurarás de conseguir una mejor producción.
Cuando te pongas manos a la obra, recuerda dejar si es posible, unos 20-30 cm entre cada planta. Obviamente, esto dependerá un poco de si has escogido macetas individuales o más grandes. Sea la maceta pequeña o grande, siempre hay que dejar espacio entre las plantas, con vistas al futuro, cuando hayan crecido y ya tengan también los frutos.
Riego
Es muy importante regar a menudo, la tierra debe estar siempre un poquito húmeda, pero sin excedernos.
Por eso, es imprescindible tener un buen sistema de drenaje. Si la planta llega a encharcarse, se pudrirá, por lo que acabarías perdiéndola y tendrías que volver a plantar.
El sistema que te recomendamos para evitar que se inunde la planta es el riego por goteo.
El riego no es solo importante después de plantar las fresas, también antes. Cuando vayas a trasplantar la plántula, has de humedecer bastante la tierra que previamente has colocado en las maceta que vas a utilizar. También es fundamental que mojes un poco las raíces de la plántula. Después de esto, ya puedes finalizar el trasplante sin problemas.
Conclusión
Esperamos que este artículo te haya resultado útil. Por último solo queremos recordarte que hay que tener unos cuidados básicos para garantizar el correcto desarrollo de la planta. Recuerda que crecen con bastante facilidad: ahora podrías tener tu propia planta en tu piso, no necesitas una casa de campo o un huerto.
Por ejemplo, debes renovar las plantas cada dos años aproximadamente, ya que con el paso del tiempo crecen con menos frecuencia. A la hora de volver a plantar, no es muy aconsejable usar las semillas de las fresas que ya hayamos recogido. Es mejor comprar de nuevo plántulas o semillas.
Una última idea es que mantengas las fresas un poquito elevadas, para impedir que se pudran o sean atacadas por insectos, algo que debes evitar a toda costa. Y recuerda que en cuanto las fresas estén maduras debes recogerlas para consumirlas, ya que se estropean bastante rápido. Ahora podrás cultivar fresas en casa sin problemas.