Consejos para el mantenimiento del rosal en perfecto estado
Las rosas son una de las flores más comunes en todo el mundo. Su belleza y fragancia se asocian al amor pero también a la decoración o la belleza. El correcto mantenimiento del rosal hará que disfrutemos de esta preciosa flor.
El mantenimiento del rosal es un aspecto fundamental si queremos tener rosas espléndidas, con agradable fragancia y belleza sin igual.
Sin un correcto mantenimiento podríamos llegar a tener un rosal enfermo y obviamente esto se reflejaría en las rosas.
Además de por su belleza, las rosas son también utilizadas para usos gastronómicos, medicinales, para hacer aceites esenciales e incluso para tratamientos de belleza.
Un jardín con rosales es un jardín bello, especial, romántico y con una fragancia única.
En el artículo de hoy te contamos cómo debe ser el mantenimiento del rosal para estar siempre perfecto.
¿Qué es un rosal?
Esta pregunta parece obvia, pero antes de saber cómo se debe mantener un rosal vamos a describir sus características ya que esto nos hará entender mucho mejor los cuidados que necesita.
En primer lugar, los rosales son un arbusto de tipo espinoso de la familia de las rosáceas.
En la actualidad se conocen más de cien especies silvestres aunque este número es mucho mayor si tenemos en cuenta todos los rosales híbridos que día a día salen nuevos.
La flor del rosal es la rosa y esta puede ser de muchos colores e incluso tamaños, dependiendo de la especie y de si es un rosal sano o no.
Por otra parte, destaca del rosal su fragancia. Además, es una planta que florece continuamente todo el año, sobre todo si nos encontramos en climas cálidos.
El mantenimiento del rosal
El mantenimiento específico del rosal va a depender de la especie de rosal que tengas. Pero en general, con los consejos que te vamos a dar a continuación vas a poder disfrutar de un rosal espléndido todo el año.
¿Cómo debe ser el suelo?
Un buen mantenimiento del rosal comienzo por la elección de un buen suelo. El rosal se caracteriza por necesitar un suelo permeable. Esto quiere decir que tenga un buen drenaje.
¿Por qué? Porque si el suelo es propenso a encharcamientos, nuestro rosal tenderá a desarrollar hongos, una de las enfermedades más comunes.
Además, debes evitar que las raíces de tu rosal se puedan enredar con las de otras plantas u otros árboles o arbustos.
La luz que necesita un rosal
Por otra parte, el rosal es una planta que requiere mucha luz directa. Entre 6 y 8 horas al día aproximadamente.
Por ello es importante su situación. Si donde vives tienes temperaturas muy altas, entonces podrás situar tu rosal en una zona con sombra.
Si no es así, procura que esté en un lugar donde tenga luz directa durante dichas cantidades de horas.
La importancia del agua
El buen mantenimiento del rosal también incluye un buen riego. Para disfrutar de unas rosas hermosas, es importante que el riego sea continuo y abundante. Sobre todo durante la primavera que es cuando, generalmente, se produce la floración.
De ahí la importancia de un suelo con un buen drenaje, porque al necesitar tanta agua no se deben producir encharcamientos.
También es fundamental que sepas que las hojas y las flores debes evitar regarlas para que no se estropeen o sufran enfermedades como los hongos.
La poda
El rosal necesita ser podado una vez al año, de lo contrario no habrá floración. Es fundamental quitar las flores ya marchitas y las hojas secas para que salgan nuevas.
Esto se debe hacer cuando ya no haya riesgo de heladas, por ejemplo en el mes de marzo. En el este enlace podrás encontrar todo lo necesario antes de la poda.
Abono
Sobre el abono, cabe destacar que el rosal necesita una buena cantidad de nutrientes que ayuden en su correcto desarrollo y crecimiento.
Es importante comenzar a abonar desde el inicio de la primavera hasta agosto. Por otro lado, el rosal necesita tanto abono líquido como granulado así como uno natural u orgánico.
Enfermedades y plagas
Para hacer un perfecto mantenimiento del rosal también debes saber que en ocasiones necesitaras pesticidas. Las plagas más habituales en los rosales son los pulgones y los escarabajos.
Y, como hemos mencionado anteriormente, la enfermedad más común son los hongos.
Para combatir tanto las enfermedades como las plagas puedes acudir a una tienda especializada. Allí te recomendarán un producto específico.
Conclusión
Como ves, el mantenimiento del rosal no es tan complicado. Basta con tener estos consejos en cuenta y ser muy observador con la planta para tener unas rosas hermosas en tu jardín o terraza.