Decoración con plantas trepadoras

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez

Última actualización: 31 mayo, 2019

¿Tienes una casa de campo y quieres decorarla con recursos naturales que le aporten frescura y viveza? Existen diferentes fórmulas, pero serán las plantas las que puedan aportar la sensación de naturalidad que estamos buscando. En esta ocasión, te mostramos una opción muy interesante: la decoración con plantas trepadoras.

Es posible que hayas estado en el campo, en un parque o en cualquier espacio natural y hayas visto una gran superficie cubierta por una planta que posee distintas ramificaciones e infinidad de hojas. Pues bien, esto es lo que denominamos plantas trepadoras.

¿Por qué se caracteriza esta especie? Suelen ocupar grandes espacios y tienen un crecimiento continuado, de ahí que se hayan convertido en un recurso decorativo realmente interesante para fachadas, porches, terrazas o paredes.

Significado estético y sutileza decorativa

Bien es cierto que este tipo de plantas ofrecen una estética diferente a otros recursos que podemos encontrar en casa. Evidentemente, no podemos comparar la función y el significado de estas en comparación con los elementos que encontremos, por ejemplo, en un salón. Cada recurso tiene su sentido.

Lo que necesitan es básicamente una pared, una alambrada o simplemente una celosía donde puedan trepar y enredarse. Eso sí, hay que guiarlas para que no se expandan por lugares donde no queremos que estén. De esta manera, estamos contribuyendo personalmente con la decoración.

A su vez, constituyen uno de los grupos de plantas que más posibilidades ofrecen en la decoración de una vivienda. Es como si se estuviese creando un telón de fondo con función ornamental y ayudando a destacar la vivienda allá donde se sitúe.

Las plantas trepadoras dinamizan enormemente la decoración del hogar.

Clasificación y especies de las plantas trepadoras

Las plantas trepadoras que son más comunes en los hogares podríamos agruparlas en 3 grupos especiales. Las características de cada una de ellas dependerá, incluso, de su forma de escalar y, por supuesto, de los tipos de tratamiento que requieren para tener un buen cuidado. Veamos cuáles son:

• Trepadoras por zarcillos foliares: son unas prolongaciones que salen del peciolo de las hojas y ayudan a que se fije correctamente la planta al soporte. De esta manera, asciende sin apenas esfuerzo y adquiere grandes dimensiones. Un caso ejemplar es el llamado Pisum sativum.
• Otro caso son las que emiten raíces aéreas adventicias que nacen directamente en los tallos y se fijan en los soportes sólidos. Un caso particular es la hiedra Hedera helix, la cual crece sobre paredes y superficies verticales. Es bastante común encontrarla en torno a los troncos de los árboles.
• Las volubles son otras de las especies que crecen enrollando sus tallos de forma espiral alrededor de un soporte. Es el caso de la Lonicera periclymenum.

Dos especies de plantas trepadoras ideales para enrejados

Por otro lado, podemos encontrar otro tipo de especies que se adaptan muy bien a cualquier tipo de superficie. Es como si las ramificaciones supieran perfectamente qué caminos coger para proporcionar, así, un estética particular y atractiva.

Las trepadoras rastreras y reptantes son las que crecen sobre superficies horizontales o verticales. Se conforman por tallos que se adhieren de forma efectiva recubriendo por completo el espacio que sea. Además, purifican el ambiente. Un ejemplo son las Cucurbitaceas, o comúnmente conocidas como calabazas.

Otro caso son las sarmentosas: poseen tallos alargados y sin órganos de fijación. En el fondo, son perfectas para que crezcan sobre enrejados, ofreciendo una estética realmente bonita, llena de curvas y dinamismo. Un ejemplo muy claro es la Bougainvillea glabra.

El rosal trepador: belleza natural

Esta especie resulta muy peculiar por la morfología que adquiere una vez que ha invadido un lugar. En otras palabras, es un tipo de planta que trepa por cualquier superficie, pero es bastante común encontrarla enroscada sobre estructuras cilíndricas.

En numerosos parques y jardines se pueden encontrar este tipo de rosales. No obstante, también suelen expandirse por paredes y superficies lisas. Requieren mucha luz; por eso, es bastante común encontrar esta trepadora en lugares con ambientes cálidos y soleados.

Si pretendes colocarla en la fachada principal, tu casa comenzará a relucir de forma llamativa, tanto por el color que ofrecería como por la estética elegante que adquirirá. Sin lugar a dudas, tu vivienda lucirá de una manera espectacular, aportando personalidad y rotundidad a la fachada.