Exceso de ropa en el armario, ¿qué hacer con ella?

La sociedad está acostumbrada a comprar y llevar a casa ropa que, en muchas ocasiones, no se le da una utilidad continuada. Es importante irse deshaciendo de aquello que ya no se utiliza.
Exceso de ropa en el armario, ¿qué hacer con ella?
Francisco Jiménez

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez.

Última actualización: 20 noviembre, 2018

El mundo consumista en el que vivimos nos obliga a realizar compras innecesarias, especialmente de prendas de vestir, las cuales usamos pocas veces y las almacenamos en casa. Ante el exceso de ropa en el armario, ¿qué hacer con ella?

A veces tenemos la concepción de que las cosas a pesar de no ser usadas durante mucho tiempo o casi nunca las vamos a utilizar el día de mañana. Nos autoengañamos pensando que es mejor conservar todo por si acaso algún día es necesario.

En realidad, convertimos la casa en un lugar de almacenaje, sobre todo el armario del dormitorio o del vestidor, lo que puede suponer el deterioro de la estética del lugar. Así, predomina el caos sobre el orden.

Pautas a seguir antes de proceder a una compra

Si sabemos que nuestro armario guarda en su interior una alta cantidad de prendas de vestir, debemos hacer una autoevaluación de la situación vital en la que nos encontramos, ya que el exceso de ropa no es nada bueno, ni para nuestro hogar ni para nosotros.

Uno mismo debe reconocer que vivimos en la abundancia y que utilizamos la mitad de lo que se tiene; por eso, realizar más compras se convierte en un hábito consumista, e incluso, un problema en aquellos que lo necesitan hacer casi a diario.

Por tanto, haz una autocrítica antes de ir a comprar. Si realmente se necesita algo, está bien que se acuda a por ello; en cambio, si simplemente se hace porque te gusta algo pero ya tienes otras tantas prendas del mismo tipo, entonces debes cuestionarte si lo estás haciendo bien.

Armario ordenado.

Soluciones para la ropa que ya no usas

En el caso de que hayas decidido dar el paso para cambiar y eliminar de tu hogar aquella ropa que ya no usas, algunas soluciones factibles son las siguientes:

  • Reutilización de prendas viejas para trapos o para actividades que supongan un nuevo uso, como por ejemplo para la limpieza. De esta manera, se le da una segunda vida y se oxigena el armario.
  • Donar ropa que esté en buen estado y que ya no utilices. Existen organizaciones benéficas que recogen ropa y la destinan a personas pobres.
  • Tirar al contenedor de ropa para que pueda ser reciclada o utiliza para otros fines, incluso la que está rota. En todas las ciudades se están disponiendo este tipo de contenedores. El mundo del reciclaje está teniendo cada vez más éxito.
  • Emplear la tela para otro usos: manualidades, parches, decoración, etc.

El orden previene la suciedad

Otro factor a tener en cuenta es la posibilidad de no generar suciedad a través de la acumulación de ropa, ya que puede convertirse en el nido perfecto de cualquier insecto o un banquete idóneo para una polilla.

El tener el armario bien oxigenado, con espacio suficiente como para que “respiren” las prendas, permite la prevención de que aparezca cualquier tipo de animal inesperado.

De esta manera, el orden debe ser el principal medio para favorecer la higiene. No está de más que se utilice algún producto antipolillas.

– Es preferible tener un número determinado de ropa que te va a ser útil en el día a día.-

Orden en el armario.

El beneficio de tener un armario espacioso

Es importante que mantengamos un orden dentro del armario y los cajones. Resulta muy útil poder acudir a ellos y comprobar que existe espacio suficiente como para poder ver la ropa, que no esté arrugada ni tampoco amontonada.

  • El orden no deteriora la ropa. Puede estar correctamente dispuesta y a mano sin necesidad de tener que buscar sacando todo para después volver a meterlo.
  • La practicidad debe estar por encima de la ineficacia. Todo aquello que suponga un almacenamiento sin control es negativo para las personas y la convivencia con uno mismo.
  • Tener espacio disponible siempre que se quiera para guardar una nueva prenda o simplemente para distribuir mejor todo el interior del armario.
  • Bienestar, confort y limpieza estarán presentes en tu día a día siempre y cuando se mantenga el orden en el armario y no se convierta en un lugar de acumulación de ropa.

– Los buenos hábitos convierten a la gente en personas nobles.-



  • G. Schiffman, Leon; L. Kanuk, Leslie: Comportamiento del consumidor, Pearson Prentice Hall, 1978.