Las suculentas: una nueva obsesión natural
En lo que a plantas se refiere, lo creas o no, también hay tendencias. Y desde hace unos meses, las cuentas de los instagramers parecen tener un leitmotiv en lo que a botánica se refiere: las suculentas. Esas plantas bonitas, con una gran variedad y fáciles de cuidar… ¿Qué más se puede pedir?
¿Qué son las suculentas?
Las plantas suculentas, también llamadas crasas, “son aquellas en las que algún órgano o parte se ha modificado en una nueva especialización que permite el almacenamiento de agua en cantidades mucho mayores que en el resto de las plantas”.
Entre sus peculiaridades, te diremos que las suculentas son geométricamente perfectas y que son originarias de zonas áridas, por lo que tienen la capacidad de aguantar periodos de sequía gracias a ese almacenaje que hacen del agua. Los cactus entran dentro de esta categoría; con esta pista, seguro que te vas haciendo una idea del tipo de cuidados que va a necesitar.
¿Cómo cuidar las suculentas?
Es la especie perfecta si te gustan las plantas, pero eres algo olvidadizo. Requieren muy pocos cuidados, no hay que regarlas a menudo y se adaptan prácticamente a cualquier entorno. Toma en cuenta estos consejos de cuidados básicos:
- Iluminación. Necesitan bastante luz, pero no debe ser directa del sol. Además de que las deshidrata y pierden sus reservas de agua, también se pueden quemar. Si notas que las hojas se ponen amarillas o marrones, es que están sobreexpuestas, y si se tornan verde pálido, te están pidiendo luz a gritos.
- Agua. Con una vez por semana será más que suficiente, pero observa la tierra y no añadas más hasta que esté seca. Es importante cuidar su drenaje, y para ello, coloca un platito debajo de la planta para que elimine el agua sobrante, no lo dejes encharcado
- Fertilizante. Busca un buen abono, de preferencia ecológico, y utilízalo durante el invierno para mejorar la salud de las suculentas.
- Tipo de sustrato. No olvides que crecen en zonas áridas, es decir, sobre rocas o incluso en las cortezas de los árboles, por lo que una tierra adecuada para cactus será ideal. Puedes mezclarla con arena para que funcione mejor, y de paso, verás qué bonita queda la maceta.
- Trasplantes. Aunque no lo creas, crecen, así que obsérvalas. Cada dos años es posible que necesiten una maceta más grande para que puedan seguir creciendo sanamente.
Algunas de las suculentas más bonitas
Cabeza negra (Aeonium arboreum atropurpureum)
Su nombre viene dado porque sus hojas son de color negro o púrpura muy oscuro. Puede crecer hasta un metro de alto y está compuesta por pequeños troncos y las hojas en forma de flor.
Cola de burro (Sedum morganianum)
Sus hojas tienen forma de cilindro y crecen en ramilletes colgantes de color verde pardo. Son preciosas en macetas altas. Sus hojas son muy delicadas y se desprenden con facilidad, por lo que debes moverlas y tocarlas con cuidado.
Cactus de Navidad (Schlumbergera x buckleyi)
Esta suculenta florece, y cuando lo hace, debemos poner especial cuidado en el riego, ya que el exceso o la falta de agua puede causar que se caiga la flor.
Árbol de jade (Crassula ovata)
Esta es una planta muy apreciada, puesto que se la relaciona con la abundancia económica. Es una de las que más fácil se cultiva. Sus hojas verde brillante, en forma de pequeños arbolitos, son muy decorativas.
Aloe vera
El aloe vera es una de las más conocidas. Sus hojas afiladas y con espinas están llenas de una savia con propiedades beneficiosas para la salud. Es especialmente interesante su uso para problemas de la piel.
Rosa de alabastro (Echeveria elegans)
Tiene una forma muy similar a la alcachofa y un color pálido azulado. En ocasiones, le brota flores de color rosa, de entre 10 y 25 cm.
¡Más suculentas!
Es muy sencillo multiplicar tus plantas a partir de sus tallos:
- Quita una o varias hojas del tallo delicadamente.
- Déjalas secar un máximo de tres días.
- Pon las hojas en la tierra donde quieres que echen raíces.
- Pulveriza un poco de agua a las hojas y a la tierra.
- Disfruta de tus suculentas, cuyas raíces crecerán a partir del primer mes.
Las suculentas son preciosas y hay un sinfín de formas en las que puedes usarlas para decorar: en una caja de madera, en macetitas combinadas, dentro de una esfera de cristal, en tu jardín mezcladas con sus formas y colores… Verás que en cuanto las conozcas, no vas a querer sacarlas de casa.